CONDICIÓN ECONÓMICA E INSTITUCIONAL DE LAS
POBLACIONES ADYACENTES A LA RESERVA BIOLÓGICA ALBERTO MANUEL BRENES
ECONOMIC AND INSTITUTIONAL CONDITIONS ON TOWNS ADJACENTS TO ALBERTO MANUEL BRENES BIOLOGICAL RESERVE
Ismael G. Guido
Granados
Palabras clave
Área de amortiguamiento, área protegida,
conservación biológica, indicadores económicos, indicadores institucionales.
Keywords
Buffer zone, protected area,
biodiversity conservation, economic indicators, institutional indicators
Fecha de recepción: 7 de febrero, 2014 - Fecha de aceptación: 4
de agosto, 2014
Resumen
El conocimiento que se tenga sobre las condiciones económicas
e institucionales que presentan las
comunidades vecinas a las áreas protegidas es fundamental para
consolidar el esfuerzo de conservación
que se esté ejecutando en ellas y también para alcanzar las
mejores condiciones de los habitantes
de las comunidades. De este modo, se presenta la realidad que sobre estas
temáticas muestra la periferia
de la Reserva Biológica Alberto Manuel Brenes, en donde el ingreso
económico per cápita es
tan bajo que lleva a que la población se ubique en condición de
pobreza extrema. A la vez no existe en
estos lugares un adecuado manejo y disposición final de los residuos
sólidos. En el ámbito
institucional existe una amplia cobertura del servicio eléctrico, pero
no lo es así para el acceso a
telefonía tanto fija como móvil y a Internet.
Abstract
The knowledge about the economic and
institutional conditions in the communities around the protected areas is essential to strength the
conservation effort that is running into them and also to achieve the best conditions of the inhabitants of
the communities. Thus, the reality shows on these topics presents the periphery of the Alberto Manuel
Brenes Biological Reserve, where per capita income is so low that leads the population to
locate in extreme poverty. Meanwhile in these places there is no proper management and disposal of solid
waste. At institutional level there is a wide electricity
coverage, but not so for access to telephone and mobile telephone, and Internet.
CONDICIÓN ECONÓMICA E INSTITUCIONAL DE LAS
POBLACIONES ADYACENTES A LA RESERVA BIOLÓGICA ALBERTO MANUEL BRENES
INTRODUCCION
Desde la década de
los setenta, Costa Rica apostó por la conservación de los recursos naturales. Este proceso inicia con la
creación del Sistema de Parques Nacionales,
estableciéndose en setiembre de 1970 los primeros parques nacionales estatales: volcán Poás,
Tortuguero y Cahuita, y
Santa Rosa en marzo de 1971 (Boza, 1988).
Con el pasar de los
años, estos espacios fueron ganando más relevancia en la dinámica de la economía nacional,
al presentarse en la década de los noventa un importante aumento en la visitación del
turismo naturalista a las áreas protegidas, pero a pesar de estos cambios, no se han realizado
los esfuerzos para reinvertir parte de
las ganancias generadas en las áreas silvestres protegidas estatales (Adamson, 2008). La
falta de reinversión se refleja en la carencia de pago de tierras que se
presenta en la mayoría de las
áreas silvestres establecidas, ya que un 15% de los parques nacionales y un 46% de las reservas
biológicas todavía están en manos privadas, a pesar de ser las principales y
más restringidas categorías de manejo (Proyecto Estado de la Nación, 2003).
Para combatir los
inconvenientes que provocan este tipo de vacíos presentes en la conservación, se procura que en los
terrenos ubicados en la periferia de las áreas
protegidas, se establezcan zonas de amortiguamiento. Estas deben abarcar los aspectos críticos para la
conservación, considerando los beneficios directos del área protegida a las comunidades más
cercanas (agua para consumo humano y agrícola)
y las amenazas más inmediatas a los recursos que se protegen
(crecimiento de la frontera
agrícola, actividades ilegales, incendios forestales,
contaminación del suelo, del
agua y del aire por agroquímicos) (Morales y Bermúdez, 2002).
La finalidad de estos
espacios es sumar protección al área protegida y tomando en cuenta que es común que en ellos se
asienten comunidades, en algunas circunstancias
también buscan compensar a los lugareños por la pérdida de
acceso a los recursos que esta posee.
Por ejemplo, actualmente se reconoce que algunas áreas protegidas representan una limitación para
que las comunidades locales puedan continuar
con sus formas tradicionales de aprovechamiento de los recursos naturales, así como también hay especies
que se protegen y que causan impactos negativos
en las actividades productivas de las poblaciones locales, por lo que es esencial desarrollar una relación de mutuo
beneficio con los pobladores vecinos al área silvestre protegida (García, 2002).
En el caso de la Reserva
Biológica Alberto Manuel Brenes (ReBAMB), los primeros asentamientos humanos que se establecieron
en su periferia datan de finales del
siglo XIX y comienzos del XX. En el año 1906 se funda Cedral de Miramar, ya
en 1924 se tiene conocimiento de los poblados San Lorenzo y Colonia Palmareña.
Posteriormente, en 1941, ya se reportan los poblados de Las Rocas, San Jorge y San Roque, estos ubicados en el extremo noroeste de
la cuenca del río San Lorenzo (Vargas,
1978).
Partiendo de estas
referencias se tiene como objetivo mostrar la condición económica e institucional que presentan las
poblaciones adyacentes a la ReBAMB y cómo influyen en el proceso de
conservación que se da en esta área protegida.
MATERIALES Y MÉTODOS
Área
de estudio:
El área protegida
conocida como Reserva Biológica Alberto Manuel Brenes (ReBAMB) fue oficialmente
creada el 10 de junio de 1975 bajo la categoría de manejo y nombre de Reserva Forestal de San
Ramón. Esta categoría permite que se puedan dar planes de aprovechamiento forestal y se
aplica en espacios cubiertos de bosque
en la mayor parte de su extensión, que contenga amplias zonas apropiadas
para la producción de madera,
agua, forraje, vida silvestre o recreación al aire libre. Puede contener algunos rasgos excepcionales, pero
no muy extensos ni muy importantes a
escala nacional (Sánchez, 2000).
Posteriormente, en 1991 se
promulgó el Decreto Ejecutivo que cambió su categoría de manejo a Zona Protectora, la cual
es un área constituida por bosques y terrenos de aptitud forestal, cuyo objetivo principal es la
protección del suelo, la regulación del régimen hidrológico, mantener o
mejorar la calidad y cantidad de los recursos hidrográficos, la conservación de las
cuencas hidrográficas y del ambiente. En sí, bajo esta categoría se tienen áreas que no
encierran ningún rasgo único o sobresaliente de carácter natural o ecológico, son de escaso valor
científico y potencial recreativo, pueden contener productos madereros aprovechables, que no
podrían utilizarse sin perjudicar la calidad o cantidad del agua; además, puede contener
asentamientos humanos y algunas zonas alteradas.
Por las carencias que presentan las categorías mencionadas, es que en el
año de 1993, a través de
la Sede de Occidente de la Universidad de Costa Rica y de la Asociación Ramonense para la Conservación
del Ambiente (ARCA), se promueve el cambio definitivo
en la categoría de manejo a Reserva Biológica (Sánchez,
2000).
La ReBAMB
se ubica en el extremo sur de la Cordillera de Tilarán,
en la cuenca alta del río San
Lorenzo, en el distrito Los Ángeles de San Ramón, provincia de Alajuela. Cuenta con una superficie de
7.800 hectáreas y un perímetro de
35 km de longitud, alrededor de los cuales se asientan, entre otras, las comunidades expuestas en este documento: Corazón
de Jesús en Puntarenas, Cedral y Zapotal en Montes de Oro, junto con Los Criques,
Parcelas y Colonia Palmareña en San Ramón de Alajuela (Guido, 2007). Para
efectos de la investigación se tomó como criterio de escogencia la cercanía de
estas comunidades al área protegida, pues
se ubican en distintos puntos de su periferia, además de que forman
parte de los frentes de
colonización que históricamente han ejercido presión sobre
la ReBAMB (Artavia, 2005). Se entiende como periferia los dos primeros
kilómetros alrededor de los
límites oficiales de esta Reserva, con excepción de los sectores de Los Criques y de Zapotal, en que el rango se
amplía para tomarlos en cuenta (Figura
1).Cedral está ubicado 28 kilómetros al
noreste de la ciudad de Miramar de
Montes de Oro, posee una población cercana a los 350 habitantes. Zapotal
de Miramar, en el costado suroeste de
la ReBAMB, cuenta con 140 personas pobladoras y Corazón de Jesús, al
noroeste, con aproximadamente 200 habitantes. Todas estas comunidades presentan actividades
económicas principalmente de tipo agrícola y ganadera, aunque recientemente se han
construidos proyectos turísticos de pequeña
escala en estos sitios (Guido, 2007).
Por su parte, Los Criques se
ubica al norte del distrito de Los Ángeles, cantón de San Ramón, cuenta con una
población de 300 habitantes. En las comunidades de Parcelas y Colonia Palmareña
en San Ramón, se ha presentado un proceso de
despoblamiento que ha llevado a que tanto el número de habitantes como
de servicios que se brinda en ellas
hayan disminuido considerablemente. En Parcelas, ubicada
en el costado suroeste de la ReBAMB, habitan 33
personas; mientras en Colonia Palmareña, ubicada en el costado este, tan solo
viven 11.
METODOLOGÍA
Durante la etapa de
investigación fueron analizados 22 indicadores propuestos por el Observatorio del Desarrollo (ODD) de la
Universidad de Costa Rica (2002). Debido
a que estos indicadores están diseñados para un análisis a
escala nacional, se tomaron aquellos
que se pudiesen ajustar a una escala más baja, como en este caso la región tipo rural que conforma la
periferia de la ReBAMB.
Los indicadores
seleccionados fueron siete del parámetro ambiental, relacionados al uso forestal, agrícola o
urbanístico del suelo, a la presencia de áreas protegidas en la zona, a la tala autorizada de
árboles y a la presencia de especies vegetales
y animales en peligro de extinción, para esto se empleó el
análisis de imágenes aéreas,
visitas de campo y revisión de expedientes en el Ministerio de Ambiente
y Energía. En el ámbito
social se analizaron ocho indicadores, relacionados a nivel de pobreza y desempleo, uso de tanques
sépticos, población con acceso a agua potable, cobertura de la seguridad social, nivel de
alfabetización y cobertura de la escolarización
en primaria y secundaria. Para esto se empleó entrevistas a actores claves, revisión de archivos de los Equipos
Básicos de Atención Integral en Salud (EBAIS) de las comunidades, así como la
aplicación de encuestas (Guido, 2007).
Además, se midieron
los indicadores que se presentan en este documento, a saber, tres del área económica,
respecto a la separación de residuos para enviar a reciclar, otro sobre la reutilización de
residuos y el promedio de ingreso económico
mensual per cápita por familia. Finalmente se incluyen cuatro del
componente institucional, relacionados
con el acceso a Internet, servicio de electricidad, así como a la telefonía fija y celular. Para la
obtención de los datos de estos últimos, entre setiembre de 2006 y agosto de 2007, se dio la
aplicación de 191 entrevistas en igual
número de familias, con lo que se obtuvo información de un 72% de
los 1.034 habitantes residentes en la
zona de estudio (Guido, 2007).
Para realizar el
análisis de los datos se utilizó el Índice Aproximado de
Sostenibilidad (IAS), elaborado por
Gutiérrez-Espeleta (1994),
específicamente aplicando las
herramientas para calificar cada parámetro que lo conforma, en este caso
el subíndice económico
(IAS – CECt) y el institucional (IAS – CINSt).
Iniciando con el
cálculo de la calificación de cada parámetro, de la
siguiente manera:
Ckt = Calificación del parámetro k en el año t, definido
como:
Ikt = Número de indicadores que estiman el parámetro k en el
año t
Vikt = Valor (-2,2) del i-ésimo indicador que
estima a k para el año t
Ckt = . 1 . {∑l kti=1 Vikt} + ½
4 × Ikt
Finalmente, el IAS se estima
mediante la siguiente fórmula:
IASt = ∑4k=1 Ckt Ikt
_________
.
∑4k=1 Iktº
Para efectos de
interpretación, el resultado del IAS y de cada uno de sus componentes debe variar
entre 0 y 1. Al arrojar valores cercanos o iguales a 1 se encuentra en una condición idónea y
por el contrario al ser iguales o cercanos a 0 se encuentran en una condición totalmente
inadecuada.
RESULTADOS
Se evaluaron tres indicadores
económicos en la periferia de la ReBAMB, lo cual arrojó, según el IAS – CECOt, un valor de 0. Por su parte, fueron cuatro los indicadores evaluados en relación al
ámbito institucional, lo que arrojó un valor de 0,312, según el IAS – CINSt.
En relación al
parámetro económico, dos de los indicadores medidos en este análisis están relacionados con el
manejo de los residuos sólidos, estos fueron la separación de residuos para reciclaje y el
otro la reutilización de residuos, los resultados se presentan en la Tabla 1.
En relación al
promedio de ingreso económico mensual per cápita por familia, se obtuvo como resultado que este ingreso es de
¢14.625, lo que es una condición totalmente
inaceptable para este indicador.
En relación al
parámetro institucional, se midió el indicador llamado
líneas telefónicas fijas
por cada cien habitantes y el indicador líneas telefónicas
celulares (móviles) por cada
cien habitantes. En las Tablas 2 y 3 se desglosa la cantidad y densidad de teléfonos públicos,
domiciliarios y celulares presentes en la periferia de la ReBAMB: los valores
obtenidos, 14 líneas fijas y 5,3 líneas celulares por cada 100 habitantes, están por debajo de los
valores establecidos para Costa Rica.
Dentro de los indicadores
institucionales, el que presenta el mayor rezago es el referente al acceso a Internet. Además,
en ninguna de las comunidades se brinda este
servicio, ya sea en forma de los denominados café Internet o
algún otro tipo de negocio, los
datos obtenidos se presentan en la Tabla 4.
La Tabla 5, muestra la
cobertura de servicio eléctrico que se presenta en las comunidades de la periferia de la ReBAMB.
DISCUSIÓN
El bienestar
económico de todos los miembros de la sociedad debe ser una prioridad, mas no la
única, en el proceso de instituir actividades productivas que sean beneficiosas a la economía, equitativas
para la sociedad y ambientalmente responsables.
Esto como una manera de permitir el pleno desarrollo individual de las personas y garantizar el éxito de la
estructura social, es por ello que todas las actividades
productivas deben estar involucradas en el manejo adecuado de los recursos naturales y en el manejo responsable de
los residuos ocasionados en sus procesos
productivos.
En el caso de los primeros
indicadores económicos, la separación de materiales para reciclaje y la reutilización
de residuos, se obtuvieron valores preocupantemente
bajos, ya que con base en estimaciones realizadas para el país, el promedio de producción de basura es de
1,2 kg diario por habitante (PRESOL, 2007),
y dado que en la zona viven poco más de 1.000 habitantes, de mantenerse esta estimación, se produciría
más de una tonelada diaria de residuos sólidos, los cuales son manejados de forma inadecuada (Tabla 1).
El manejo inadecuado de residuos
inicia con el hecho de que en ninguna de las comunidades analizadas existe el servicio recolector de basura por parte de la
municipalidad respectiva. Dadas las deficiencias
en este aspecto, las familias acostumbran enterrar o incinerar en sus propiedades los residuos que producen (Tabla 1).
Otro inconveniente en el
manejo de residuos se presenta debido a que no existen
en la zona, al momento del estudio, iniciativas de instituciones
públicas o privadas para
fomentar la separación, reutilización y reciclaje de materiales
sólidos de desecho.
Para el indicador
separación de material para reciclaje, el valor que arroja es bajo en cuanto a cantidad, debido a que en un 90%
de los hogares visitados no se realizan
prácticas de separación de materiales, y en los que se hace es
solamente para una baja cantidad y
predominan las prácticas para manejo de residuos descritas en la Tabla 1. Además, en ambos casos,
separación para reciclaje o reutilización, la gran mayoría de residuos no están
recibiendo un tratamiento adecuado, ya que no existen
centros de acopio ni rellenos sanitarios en la zona analizada.
Los valores obtenidos para
ambos indicadores reflejan la situación que se presenta en el país, en donde la actividad
del reciclaje es propia de un sector no formal y
poco estructurado. Esta es desarrollada por empresarios de diversa magnitud, quienes generalmente son intermediarios entre el
proveedor y el reciclador. Por lo
tanto, se carece de un sistema nacional estructurado para la
recuperación, que estimule una
cultura de reducción, reuso y reciclaje de los
residuos (Observatorio del Desarrollo,
2002). Por lo que se puede afirmar que en la zona el reciclaje y reutilización de residuos separados y
recuperados es mínimo con relación a su potencial.
Se debe entender que la
mayor parte de la responsabilidad en los procesos de reciclaje recae precisamente en el consumidor,
quien es el que debe informarse y decidir
acerca del tipo de producto que desea comprar y del tipo de residuo que va a producir su consumo. Los residuos sólidos
descartados generan costos ambientales que
deberían reflejarse en el precio que paga el consumidor, quien debe
tener la conciencia de pagar un poco
más por un producto que posea un empaque reciclable. Se debe tener presente que en ningún proceso
de reciclaje se logra recuperar la totalidad
del material utilizado (Field y Field, 2003).
Aunque si bien esta no es
aún la realidad que se está presentando en la periferia de la ReBAMB, se
debe implementar un plan estratégico para el manejo de los residuos sólidos, el cual incluya la
separación de materiales para ser reciclados y reutilizados. Ante todo porque tal y como lo
manifiestan muchos habitantes, además
de ser evidente en el tipo de negocios que inician en la zona, el futuro de estas comunidades se encuentra en el desarrollo de
la industria turística, lo cual acarrearía
un aumento en la población residente junto con la población que
tan solo estaría de paso por
periodos variados, y por ende esto conlleva a que se aumente el total y variedad de residuos sólidos
producidos, por lo que se deben tomar medidas previsoras
para una futura problemática de esta índole.
Por otra parte, es de vital
importancia conocer la situación económica de las familias que residen en el espacio de
interés, esto debido a que son estas personas las que deben lidiar con la realidad cotidiana y
son precisamente las que están interactuando
y haciendo uso de los recursos naturales ahí presentes.
Por estas razones se
midió el indicador denominado promedio de ingreso económico mensual per cápita por
familia. Para las familias presentes en la periferia
de la ReBAMB, el resultado demuestra que el valor de
ingreso es sumamente bajo ya que tan
solo alcanza el monto promedio de ¢14.625 por persona por familia por mes, lo que a la vez colocaría a toda la
población analizada en una condición de pobreza extrema, lo cual sería una forma
de interpretar la mala distribución de los
recursos económicos que impera en la actualidad. La razón radica
en que al ser estas comunidades de
tipo rural las actividades a las que se dedican sus habitantes son principalmente las agropecuarias. Debe
destacarse el hecho de que la pobreza
en esta zona se manifiesta como la escasez de dinero circulante y no como la presencia de tugurios o indigencia, que son
expresiones comunes en otras zonas del
país (Guido, 2007).
Las carencias
económicas presentes en la zona y las limitaciones asociadas se han reportado en distintos momentos; por
ejemplo, Sandoval (1995) indica que para
los habitantes de sitios como Bajo La Paz y Zapotal de Miramar, la ReBAMB y sus
alrededores representan importancia como suministradores de leña, caza y
pesca. Por su parte, Fernández
y Saborío (2002) señalan que para algunas familias de la zona los recursos animales extraídos
de la Reserva constituyen la única fuente de
proteína que consumen.
Este tipo de situaciones
conllevan un choque directo de intereses entre las comunidades y la categoría de manejo del
área protegida, ya que de acuerdo con Thelen y Dalfet
(1979) dentro del proceso de conservación de recursos naturales, se define la Reserva Biológica como un
área esencialmente inalterada por la actividad humana y que contiene ecosistemas, rasgos o
especies de flora y fauna de valor científico,
en la cual los procesos ecológicos han podido seguir su curso espontáneo con un mínimo de interferencia,
por lo que sus objetivos son exclusivamente la
investigación y la conservación, por lo que cualquier otro fin
debe considerarse secundario.
Es aquí en donde el
manejo de las zonas de amortiguamiento se debe plantear como la búsqueda de formas de
relación de beneficio mutuo, en donde la población tenga acceso a mejores condiciones de
vida sin detrimento de los esfuerzos de conservación
de la biodiversidad (García, 2002).
La medición de
indicadores institucionales, relacionados con el acceso de la población a medios eficaces de
información, es de elevada importancia política dado que las telecomunicaciones están
estrechamente relacionadas con el desarrollo social,
económico e institucional (Observatorio del Desarrollo, 2002). Del
análisis de las comunidades
asentadas en la periferia de la ReBAMB, se
logró obtener que existe en
promedio una baja disponibilidad de líneas telefónicas fijas
(Tablas 2 y 3). El valor obtenido para
la telefonía fija domiciliaria dista de los valores nacionales, ya que los datos evidencian un rezago. Por ejemplo,
en el año 1997 había en el país 19,5 líneas por cada 100 habitantes
(Cordero, 2000), y para el año 2004 este valor era de 31,6 líneas por cada 100 habitantes
(Programa de la Sociedad de la Información
y el Conocimiento, 2006). Pero a pesar de estas limitaciones cabe resaltar la labor hecha por parte del Instituto
Costarricense de Electricidad en este campo, para
dotar de este servicio a comunidades que de lo contrario quedarían
aisladas del resto del país.
El acceso a líneas
telefónicas celulares también es escaso (Tabla 3), en este sentido y en relación con la
situación nacional que se presenta en cuanto a la densidad de esta telefonía, se debe tener
presente que la cobertura nacional de este servicio
en el año 2004 era de 21,7 líneas por cada 100 habitantes
(Programa de la Sociedad de la
Información y el Conocimiento, 2006). Lo anterior muestra un rezago en esta temática en la zona de
estudio, pero se debe tener presente que tal y como
se logró comprobar durante el trabajo de campo, en la gran
mayoría del área de la
periferia analizada la cobertura para telefonía celular de
tecnología TDMA o GSM era nula
y donde la había era de mala recepción.
El acceso a Internet es el
aspecto que presenta el mayor nivel de rezago, ya que de la totalidad de hogares muestreados, tan
solo cuatro de ellos contaban con este
servicio. Además en ninguna de las comunidades se brinda este servicio ya
sea en forma de los denominados
café Internet o algún otro tipo de negocio (Tabla 4). A partir de lo anterior se puede afirmar que
solamente un 2,1% de las familias tiene acceso
a esta herramienta tan útil y necesaria en la vida moderna.
Esta situación, aunque
es extrema, demuestra la realidad que se presentaba el país en el año 2007, ya que el
nivel de acceso a Internet de la población de zonas urbanas era del 85,2% y, por el contario, en
el caso de las comunidades rurales del
país este valor era de tan solo un 14,8%. Esto deja de manifiesto el porqué
de la poca accesibilidad que se tiene en las comunidades de la periferia de la ReBAMB a este servicio,
pero al comparar esta accesibilidad de acuerdo con los valores según las regiones de
planificación, se observa que es solo un poco menor a los datos de las dos regiones de interés,
que son la Huetar Norte, con un 3,6%, y la Pacífico Central, con un 3,7% (Programa
de la Sociedad de la Información y el Conocimiento,
2006).
Este contraste conlleva a
que se acentúe la denominada brecha digital, entendiéndose por esta la diferencia en cuanto al
acceso y uso de las aplicaciones de las tecnologías
de la información y las comunicaciones entre individuos de un mismo país, o entre diferentes países o
regiones. De hecho, el concepto de brecha digital está estrechamente relacionado con el nivel
de ingreso, género, nivel de educación,
lugar de residencia, edad y otras dimensiones socioeconómicas (Monge y Chacón, 2002). Esta afecta a las personas y
grupos sociales y suele manifestarse en un
desequilibrio entre la productividad y el desarrollo tecnológico, lo
cual afecta la competitividad
económica de los países y regiones frente a un mundo que, aunque segmentado desde el punto de vista
tecnológico, se integra cada vez más en otros ámbitos (Programa de la Sociedad de la
Información y el Conocimiento, 2006).
Finalmente, en
relación a la cobertura de servicio eléctrico, es el rubro mejor calificado en este análisis, ya que de las
comunidades involucradas, solo Colonia Palmareña carece de este servicio
(Tabla 5), el nivel de cobertura resulta similar al valor nacional, el cual según Fallas (2001)
es cercano a un 98,5%. Esta alta cobertura permite
que los habitantes de esta zona tengan un fácil acceso a la
información que se brinda por
medio de la radio y televisión. Potencialmente, al existir una alta
cobertura de servicio eléctrico
y acceso a instituciones de educación, se puede llegar a dar en el mediano plazo una mayor accesibilidad al
servicio de Internet. También, se debe tener
presente la serie de facilidades que conlleva el poseer este servicio, en
aspectos tales como el hogar o en la
producción agrícola o industrial.
Dado que en Costa Rica se
estableció desde el año 1994 el denominado Sistema Nacional de Áreas de Conservación
(SINAC) para manejar los recursos naturales mediante
la creación de once áreas de conservación, en las cuales
no solo se incluye como su
jurisdicción las áreas silvestres protegidas sino la totalidad
del país, se debe entender que
al ser responsabilidad de este organismo velar por la conservación, es necesario tener datos muy claros sobre la
situación, en este caso institucional y económica,
que se presenta en cada una de las comunidades que conforman las áreas de conservación, para así saber con
certeza las repercusiones que las actividades humanas
están teniendo sobre los recursos que se están protegiendo y
planificar las medidas correctivas.
En el caso particular de los
indicadores institucionales, la importancia que manejan
dentro del proceso de conservación radica en la disminución de
presiones que se ejerzan en el
ambiente por actividades tales como el transporte debido al desplazamiento de personas que podrían
realizar trámites por Internet o teléfono. También, se debe rescatar el hecho de que
esta serie de servicios que se pueden estar brindando
en distintas comunidades, cercanas o no a las áreas protegidas,
colaboran en mejorar la calidad de
vida de las personas que habitan en estos lugares, lo cual trae entre otros beneficios, que las personas obtengan
nuevas opciones productivas, con las
cuales se puedan dejar de lado las tradicionalmente aplicadas, que traen como consecuencia actividades perjudiciales para el
proceso de conservación.
CONCLUSIONES
En la periferia de la ReBAMB existen serias carencias en lo referente al manejo de los residuos sólidos, ya que hasta
la fecha los métodos aplicados son totalmente
inadecuados. Lo anterior junto al escaso ingreso económico mensual per cápita conlleva a que la evaluación
del parámetro económico se encuentre en una condición precaria.
Se debe incrementar el
acceso de la población a medios de comunicación e información eficientes y de bajo impacto en
el ambiente, como la telefonía y el Internet.
Finalmente, es posible
indicar que los parámetros económico (IAS – CECt) e institucional
(IAS – CINSt) son para los tomadores de decisiones una
herramienta de gran utilidad, ya que
permiten el monitoreo y planeamiento de las políticas socioeconómicas e institucionales que deben
establecerse en la periferia de la ReBAMB.
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en la cuenca del río San Lorenzo, Alajuela, Costa Rica. (Tesis de Licenciatura en Geografía). Universidad de Costa Rica, Costa
Rica.
SOBRE EL AUTOR
Ismael G. Guido Granados: Máster en Desarrollo Sostenible - Conservación Biológica. Docente - Investigador de la
Universidad de Costa Rica, Sede de Occidente,
Sección de Biología. Correo electrónico: ismaelguido@gmail.com
Figura 1. Área de estudio y comunidades ubicadas en la
periferia de la Reserva Biológica Alberto Manuel
Brenes. Fuente: Modificado de (Instituto Geográfico Nacional, 1994, Hoja
San Lorenzo, escala 1:50000).
Tabla 1 |
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|||
MANEJO DE RESIDUOS SÓLIDOS EN LA PERIFERIA DE LA
RESERVA BIOLÓGICA ALBERTO
MANUEL BRENES, 2007 |
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FORMA
DE DISPOSICIÓN DE RESIDUOS |
FAMILIAS
ANALIZADAS |
PORCENTAJE
OBTENIDO |
|
|
Sólo
incineran |
27 |
14,1 |
|
|
Sólo
entierran |
51 |
26,7 |
|
|
Entierran
e incineran |
57 |
29,8 |
|
|
Incineran
y elaboran abono orgánico |
21 |
11 |
|
|
Entierran y elaboran abono
orgánico |
11 |
5,8 |
|
|
Servicio privado de recolección |
6 |
3,1 |
|
|
No respondieron |
18 |
9,5 |
|
|
Total |
191 |
100 |
|
|
|
|
|
|
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Tabla 2 |
||||
CANTIDAD
DE TELÉFONOS EN LAS COMUNIDADES DE LA PERIFERIA DE LA RESERVA BIOLÓGICA ALBERTO MANUEL BRENES, 2007. |
||||
COMUNIDAD |
DOMICILIARIOS |
PÚBLICOS |
CELULARES
(MÓVILES) |
POBLACIÓN
ANALIZADA |
Los Criques |
21 |
4 |
10 |
160 |
Colonia Palmareña |
0 |
0 |
2 |
6 |
Parcelas |
0 |
0 |
7 |
30 |
Zapotal |
0 |
4 |
7 |
82 |
Cedral |
63 |
4 |
10 |
326 |
Corazón de Jesús |
22 |
2 |
4 |
139 |
Totales |
105 |
14 |
40 |
743 |
|
|
|
|
|
|
|
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Tabla 3 |
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DENSIDAD
TELEFÓNICA POR CADA CIEN HABITANTES EN LA PERIFERIA DE LA RESERVA BIOLÓGICA ALBERTO MANUEL
BRENES, 2007. |
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TIPO
DE SERVICIO |
CANTIDAD
DE LINEAS |
LÍNEAS
/ 100 HABITANTES |
|
Fijo
(domiciliario) |
105 |
14 |
|
Celular
(móvil) |
40 |
5,3 |
|
|
|
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Tabla 4 |
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FAMILIAS
RESIDENTES EN LA PERIFERIA DE LA RESERVA BIOLÓGICA ALBERTO MANUEL BRENES, 2007. |
|||
COMUNIDAD |
FAMILIAS CON ACCESO A INTERNET |
PORCENTAJE OBTENIDO |
FAMILIAS ANALIZADAS |
Los Criques |
1 |
0,5 |
38 |
Colonia Palmareña |
0 |
0 |
4 |
Parcela |
0 |
0 |
8 |
Zapotal |
0 |
0 |
23 |
Cedral |
3 |
1,6 |
89 |
Corazón de Jesús |
0 |
0 |
29 |
Total |
4 |
2,1 |
191 |
|
|
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Tabla 5 |
|||
COBERTURA
DE SERVICIO ELÉCTRICO EN LAS COMUNIDADES DE LA PERIFERIA DE LA RESERVA BIOLÓGICA ALBERTO MANUEL
BRENES, 2007. |
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COMUNIDAD |
POBLACION ABASTECIDA |
COBERTURA POBLACIONAL |
POBLACION ANALIZADA |
Los Criques |
160 |
100% |
160 |
Colonia Palmareña |
0 |
0% |
6 |
Parcelas |
30 |
100% |
30 |
Zapotal |
82 |
100% |
82 |
Cedral |
326 |
100% |
326 |
Corazón de Jesús |
139 |
100% |
139 |
Total |
737 |
99,2% |
743 |