
Diálogos Revista Electrónica de Historia, 23(1): 1-39. Enero-junio, 2022. ISSN: 1409-469X · San José, Costa Rica18
Este período de prosperidad tuvo lugar una vez superada la crisis provocada
por la Primera Guerra Mundial (1914-1918) y el régimen tinoquista (1917-1919).
Se desarrolló un proceso de paulatina diversicación económica con la presencia
de ciclos cortos de cultivos como la caña de azúcar, cuya supercie cultivada
aumentó de 11181 Ha en 1917 a 18028 Ha en 1926; actividad que se concentró en
las provincias de Alajuela y Guanacaste, pero también con buenos rendimientos en
Cartago y San José, destinados al abastecimiento del mercado interno (Dirección
General de Estadística, 1925, p.17; 1926, pp.4-18; Pérez, 1997, pp.105-106; Botey,
2005, pp.25-30; Molina y González, 2015, pp.165-168).
En cuanto a los productos tradicionales, para el año 1925 se reporta un leve
descenso de un 1% en las ganancias de las exportaciones de café debido princi-
palmente a un menor peso bruto exportado (Kg. 2.857,897), es decir, una menor
cosecha que la captada durante los años 1923 y 1924. Sin embargo, compensó
el mejoramiento del precio internacional por kilogramo ($0,55) en los réditos de
la venta para exportación de dicho año. El segundo producto de exportación en
importancia, el banano, aumentó levemente el número de racimos colocados en el
mercado internacional (226.177), con una mejor cotización de su venta (Dirección
General de Estadística, 1925, p.17; 1926, pp.4-18).
El tercer producto en importancia, derivado de la actividad minera (el oro y la
plata en pasta, monedas o barras), sí denotó una disminución abrupta en las ventas
al exterior en 1925: solamente se obtuvo 9,68 % de las ganancias estimadas en 1924
(Dirección General de Estadística, 1925, p.17; 1926, pp.4-18).
Otro producto de creciente relevancia, aunque con vulnerabilidades en su
colocación externa debido a la irregularidad de los precios internacionales, fue el
cacao. Este fue principalmente cultivado en la provincia de Limón y llegó a un punto
máximo de producción durante la primera mitad de la década de 1920. No obstante,
entró en recesión a razón de un drástico descenso de su precio en el mercado mundial,
lo que favoreció gradualmente la pérdida de su rentabilidad. En 1925 se estimó una
supercie cultivada de 25804 Ha, de las cuales, un 40% eran explotadas por la UFCO
(Dirección General de Estadística, 1925, p.17; 1926, pp.4-18).
Para 1926, aumentó la cosecha cafetalera con poco menos de tres toneladas
más que las captadas en el año precedente y por tanto también incrementó el valor de
las exportaciones de dicho año, con un mejor precio promedio ($0,6) que el de 1925.
El cacao continuó teniendo una cuota exportadora importante y altos precios, junto
con la actividad bananera, aunque siendo esta comparativamente de un repunte más
moderado, mientras que la industria del oro y la plata continuó su recesión iniciada
en 1925 y el comercio internacional de “verduras, naranjas y frutas” tuvo también
una contracción en 1926 (Dirección General de Estadística, 1927, p.5).
En general, en 1925 aumentaron las importaciones de diversos productos
que motivaron el movimiento marítimo, la actividad portuaria y aduanera (Direc-
ción General de Estadística, 1926, p.5). El país experimentaba un acrecimiento de
cultivos de “la caña, el cacao, el arroz, y otros cereales” lo cual era considerado por