00:08:30). El espectador se ríe porque semejante caída hubiera resultado fatal para
cualquiera, pero es claro que se trata de una exageración para hacer reír, en particular
porque Emmet, a pesar de sufrir hasta fracturas, eventualmente se levanta sin daño
alguno frente a la “pieza de la resistencia”, lo único capaz de frustrar el plan del villano.
Después de que el héroe toca la pieza y pierde el conocimiento, se despierta maniatado en
un cuarto oculto, donde un policía con dos personalidades lo interroga (Lord & Miller, 2014,
00:09:08-00:10:00). La personalidad agresiva del “policía malo” permite la introducción de
más escenas de violencia, ya que este irascible personaje patea sillas, golpea mesas,
destruye equipo, agrede verbalmente al prisionero y dispone la tortura de Emmet, pero el
obrero escapa con la ayuda de Estilo Libre, la heroína.
El comportamiento de este villano, supuesto representante de la ley y el orden, puede ser
gracioso si se mira superficialmente o desde la óptica inocente de los niños. Sin embargo,
observado con más detalle y desde un punto de vista adulto, no es difícil relacionarlo con
los lamentables casos de abuso de autoridad que presentan los cuerpos policiales, lo cual
acentúa sus rasgos de humor negro. Más adelante, este mismo tipo de humor se usará de
nuevo en una escena de tortura cuando el villano principal paraliza a los padres del policía
malo delante de sus ojos para obligarlo a obedecer (Lord & Miller, 2014, 00:25:19) y Emmet
volverá a caer y golpearse a medida que desciende una montaña en su viaje para
encontrarse con Vitruvius (Lord & Miller, 2014, 00:18:24).
Además de estas secuencias, la película también muestra violentos enfrentamientos entre
los personajes, en donde abundan los golpes, los desmembramientos de los enemigos y
hasta el decapitamiento del mago Vitruvius (Lord & Miller, 2014, 01:06:54), todo enmarcado
dentro de la exageración del humor negro y la comedia slapstick. Nótese que cada uno de
los ejemplos anteriores, si bien ya resultan cuestionables para las audiencias infantiles,
adquieren connotaciones más sombrías cuando, desde la perspectiva adulta, se relacionan
a conflictos bélicos reales, lo cual acentúa su efecto de humor tabú. No es típico esperar
que las audiencias más jóvenes internalicen violencia tan gráfica y que la procesen como
simples recursos humorísticos. Cabe preguntarse cuántos adultos aprobarían que
menores observaran escenas de ese tipo en películas que no fueran animadas, por
ejemplo. El hecho de que se trate de figuras limita la violencia física, es cierto, pero no
reduce el contenido de violencia simbólica de las escenas.
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ISSN 1659-331
Cuando la vida no es increíble: La gran aventura LEGO ...
| Saravia Vargas, Juan Carlos
| Saravia Vargas, José Roberto
IV Sección: Literatura y cine
Revista Estudios, 2023
| Febrero 2023
El hecho de que las escenas violentas se encuadren como comedia podría parecer indicar
que La gran aventura LEGO está, de hecho, dirigida a los niños y no a los adultos. Después
de todo, si tanto el humor tabú como el humor a base de golpes se dosifican para no
ofender al público infantil, es posible argumentar que el mensaje principal del filme tiene a
los menores como meta. No obstante, además del tipo de humor, existe otro elemento
sustantivo en la película que es ajeno por completo a la experiencia de los niños: las
constantes referencias al mundo corporativo.
REFERENCIAS AL MUNDO CORPORATIVO Y DISTOPÍA