Revista de Ciencias Jurídicas N° 161 (1-34) MAYO-AGOSTO 2023
las cuales, como ya se ha reiterado, serán revisadas por el registrador; para el caso de la
inscripción
formulario propiamente, como acto formal, sin que se puede entender, de antemano, si este
ha
ejecución
autorizada,
fidedigna o cuente con fe pública como si pasa con aquellos documentos que ingresan a la
corriente registral, bajo el sistema de seguridad jurídica preventiva.
Esta misma situación se va a replicar en la comparación entre ambas publicidades, a
partir del principio de tracto sucesivo que se reconoce en el sistema registral. La relación
entre
calificador, sino también por la persona notaria o funcionaria judicial o administrativa que
participa del acto sujeto a inscripción. La Ley de Garantías Mobiliarias, descansa sobre un
sistema
concepción,
última instancia genera seguridad y fe pública registral.
Lo descrito en el párrafo anterior resulta aplicable también a temas de legitimidad.
Aunado
información que se obtiene de los diferentes registros se presume exacta. Esto no sucede
cuando
contenidos en el sistema de garantía mobiliarias
y las certificaciones que se expidan con
respecto a este, el carácter de documento público, lo cierto es que la norma también exime
al Registro Nacional de toda responsabilidad respecto a los datos consignados en el sistema
de
públicos en cuanto a lo que certifican, pero no en cuanto al contenido de los mismos.
Por
cumplir
inconvenientes
dados en garantía y por su esencia misma, no son de fácil identificación. La norma rompe
con este principio y permite una descripción específica o genérica de los bienes sujetos a
garantía, como resulte de interés para el acreedor, contrario a lo que ocurre a nivel registral,