Ecuaciones
de predicción de la talla a partir de la altura de la
rodilla de los adultos mayores de Costa Rica
Stature
prediction equations from the knee height for elderly in Costa
Rica
Pamela
Jiménez-Fontana1, Abner Chaves-Corea2
Resumen
La
talla es un parámetro antropométrico que permite evaluar el estado
de salud de los adultos mayores, ya que nos permite determinar el
índice de masa corporal y, con este, los niveles de obesidad, el grado
de desnutrición proteico calórica, y otros factores de riesgo. Sin
embargo, en adultos mayores con dificultad de movimiento, enfermedades
avanzadas, o cambios en la curvatura normal de la columna vertebral, es
complicado realizar una correcta medición de la talla. Cuando no se
puede realizar una correcta medición de la talla, se pueden utilizar
modelos de regresión lineal utilizando otras variables antropométricas
para estimar la talla. Por ende, el objetivo de este estudio es definir
ecuaciones de predicción de la talla a partir de la altura de la
rodilla y la edad para los adultos mayores de Costa Rica por sexo. El
estudio utilizó los datos de la encuesta longitudinal CRELES, muestra
representativa de los adultos mayores de Costa Rica. Los coeficientes
de predicción estimados a partir de CRELES se compararon con los
coeficientes de predicción estimados por los modelos (externos) de
Chumlea, Roche, y Steinbaugh (1985) y Palloni y Guend (2005). Los
coeficientes de predicción estimados con base a CRELES son, en su
mayoría, significativamente diferentes a los coeficientes de los
modelos externos; además, los coeficientes de predicción estimados con
la muestra CRELES producen residuos y errores puros menores que los
modelos externos. Se recomienda utilizar las nuevas ecuaciones de
predicción planteadas en este estudio para estimar la talla de adultos
mayores costarricenses con problemas fisiológicos y de movilidad.
Palabras clave:
talla, ecuaciones de predicción de la talla, altura de
la rodilla, antropometría
Abstract
The
stature is an anthropometric parameter that allows the assessment
of the physical health status of the elderly, estimate the obesity
levels, the degree of protein energy malnutrition, and other risk
factors. However, in patients with mobility problems or advanced
diseases is complicated to make an accurate measurement of the stature.
When there are difficulties to measure the stature, a linear regression
model can be used with other anthropometric variables to estimate the
stature. The goal of this study is to define stature prediction
equations from the knee height and the age for the elderly of Costa
Rica by sex. The study used data from the longitudinal survey CRELES,
representative sample of the elderly of Costa Rica. The prediction
coefficients estimated with CRELES were compared with the prediction
coefficients estimated by the (external) models of Chumlea, Roche, y
Steinbaugh (1985) and Palloni y Guend (2005). Most of the prediction
coefficients estimated with CRELES are significantly different from the
coefficients of the external models; also, the prediction coefficients
of CRELES generate smaller residuals and pure errors than the external
models. We recommend using the new prediction equations established in
this study to estimate the stature of elderly of Costa Rica with
physiological and mobility problems.
Keywords: stature,
stature prediction equations, knee height,
anthropometry
Fecha
de recibido: 17 diciembre del 2013 Fecha de aprobado:
17 marzo del 2014
Fecha de corregido: 7 abril del 2014
1.
Introducción
La
antropometría se utiliza como herramienta principal para la
valoración de pacientes, especialmente el estado nutricional del adulto
mayor (Ortiz, Méndez, Varela, y Pamo, 2007). La talla de los
adultos mayores es un importante parámetro antropométrico especialmente
en edades avanzadas; este procedimiento es fácil de estimar, económico
y no es invasivo en comparación con otros métodos más sofisticados
(Palloni y Guend, 2005; Berdasco, 2002; Sánchez, Duque, Juárez, Cortés,
y Reyes, 2007). Cabe resaltar que la talla es la base de muchas
terapias, sirve para la medición de la Tasa Metabólica Basal y la
prescripción de medicamentos; además, para la estimación de energía,
evitando una sobre ingesta o sub ingesta de fármacos y
nutrientes. No obstante, en muchos casos esta variable
antropométrica se vuelve imposibles de medir según el grado patológico
o de inmovilización de los adultos mayores (Berger, Cayeux, Schaller,
Soguel, Piazza, y Chioléro, 2008).
La
talla de los adultos mayores es importante para realizar un análisis
general de su estado de salud físico (Cáceres-Rodas, 2004), por lo que
mejores estimaciones permiten obtener un panorama más claro sobre el
estado de salud del adulto mayor. De acuerdo a Peña y Bacallao (2001),
América Latina ha sufrido de un importante incremento en las
enfermedades crónicas asociadas con estilos de vida no saludables.
Estas enfermedades representan un alto costo en el corto y largo plazo
para los servicios de salud en materia de tratamiento y rehabilitación
de los pacientes. La mayoría de los estudios de salud utilizan el
índice de Masa Corporal para determinar los niveles de obesidad o
desnutrición de los pacientes y así realizar recomendaciones en
términos de políticas públicas. El índice de Masa Corporal (IMC) se
calcula como el peso en kilogramos dividido por la talla en metros al
cuadrado, este es un método sencillo y de bajo costo que da indicios
sobre los niveles de obesidad o desnutrición (Deurenberg, Weststrate, y
Seidell, 1991). La talla es esencial para determinar los niveles de
obesidad y permite estimar otros factores de riesgo, tales como el
deterioro en la arquitectura ósea, grado de desnutrición proteico
calórica, cardiovasculares, entre otros. Al realizar un
diagnóstico de obesidad e iniciar un tratamiento se reduce el riesgo de
complicaciones de otras enfermedades crónicas (Peña y Bacallao, 2001).
De
acuerdo con Alemán, Esparza y Valencia (1999), los cambios
antropométricos se vuelven más relevantes con el envejecimiento y el
desarrollo de factores de riesgo de enfermedades crónico degenerativas
al impactar el estado nutricional y la capacidad funcional del
paciente. El envejecimiento se puede definir desde múltiples
dimensiones según la edad, la capacidad física, la conducta, o la
interacción de la persona con la sociedad (Alcaraz, Fong, álvarez, y
Pérez, 2001). Entre los cambios más relevantes que ocurren en el
envejecimiento podemos encontrar la depresión, la disminución de la
actividad física, el deterioro sensorial, discapacidades, enfermedades
como la osteoporosis, disminución de la capacidad funcional articular,
y pérdida de masa muscular (Brown, 2006; Mataix y Rivero, 2007;
Restrepo, Morales, Cecilia, López y Varela, 2006; Arroyo et al., 2007).
Las condiciones mencionadas pueden llegar a dificultar la toma de
medidas antropométricas como la talla, debido a la disminución de la
capacidad para colocarse de pie (Díaz, Tamez, y Gutiérrez, 2011).
Mataix y Rivero, (2007), hacen referencia a la disminución de la
estatura como uno de los cambios fisiológicos más importantes en la
etapa del envejecimiento, el cual llega a ser atribuible al
aplastamiento de los discos vertebrales, adelgazamiento de las
vértebras y la dificultad para mantener una postura erecta. A pesar de
que durante el envejecimiento ocurre una disminución de la estatura, el
resto de los huesos del cuerpo tienden a mantenerse constante; por
ejemplo, la altura de la r odilla cambia poco con el aumento
de la edad (Berral y águila, 2002). Por lo anterior, la talla
puede ser estimada a partir de la media brazada, la brazada o de la
altura de rodilla (Chumlea, Guo, Wholihan, Cockram, Kuczmarski, y
Johnson, 1998; Fernández, Martinez, García, Díaz, y Xiqués, 2005).
Por su
parte, Guzmán, Reinozan, y Hernández (2005) mencionan que la
altura de la rodilla puede ser un buen estimador de la talla siempre y
cuando esta medida se tome utilizando los criterios
establecidos. Se define como altura de rodilla a la distancia
entre la planta del pie hasta la cara anterior del muslo, con rodilla
doblada en un ángulo de 90 grados. Esta técnica se realiza
usualmente con un caliper de rodilla, en donde la base del instrumento
es colocada por debajo del talón y la otra por encima de la pantorrilla
arriba de los cóndilos de las rodillas, este debe estar paralelo a la
tibia y se debe aplicar una presión sobre el tejido (Chumlea, Roche, y
Steinbaugh, 1985; Berral y águila, 2002; Borba, Coelho, Corrêa, y
González, 2008).
Mientras
tanto, Chumlea, Roche, y Steinbaugh (1985) realizaron un
estudio experimental utilizando una muestra no representativa de los
Estados Unidos para determinar la correlación entre la talla y la
altura de la rodilla, estableciendo como variables predictoras la
altura de la rodilla y la edad. Años más tarde, Chumlea et
al., (1998) establecen nuevas ecuaciones de predicción de la talla
utilizando una muestra representativa de los Estados Unidos, con
ecuaciones por etnia y sexo. Posteriormente, se expandió esta
metodología para otras etnias y nacionalidades (Bermudez, Becker, y
Tucker, 1999). Palloni y Guend (2005) basados en Chumlea et al., (1998)
establecieron diferentes ecuaciones de predicción de la talla por etnia
utilizando la encuesta SABE (Salud y Bienestar en el Adulto Mayor) que
entrevista a adultos mayores de Latinoamérica (con excepción de Costa
Rica). Esta técnica de predicción de la talla puede ser
utilizada para determinar la estatura de una persona con problemas de
movilidad o con curvaturas pronunciadas en la columna vertebral, dado
que no implica que la persona se encuentre totalmente erguida.
Existen
estudios que han estimado coeficientes de predicción de la
talla a partir de la altura de rodilla por medio de regresión lineal
para diferentes etnias y nacionalidades (Chumlea, Guo, y Steinbaugh, M.
1994; Palloni y Guend, 2005). No obstante, dichos coeficientes de
predicción no se han estimado con base en la población costarricense,
por lo que no existen coeficientes que se adapten a las características
propias del país. El objetivo de la presente investigación es calcular
las ecuaciones de predicción de la talla utilizando como variables
independientes la altura de la rodilla y la edad basadas en una muestra
representativa de los adultos mayores de Costa Rica. Actualmente, en
Costa Rica se utilizan los coeficientes estimados por Chumlea, Roche, y
Steinbaugh (1985).
2.
Métodos y datos
El
proyecto CRELES “Costa Rica: Estudio de Longevidad y Envejecimiento
Saludable” es un conjunto de encuestas longitudinales sobre la salud y
estilos de vida de los adultos mayores en Costa Rica. El principal
objetivo del estudio es analizar el envejecimiento y calidad de vida de
los adultos mayores. CRELES es la primera encuesta longitudinal
representativa a nivel nacional que investiga la salud de los adultos
mayores en Costa Rica. El trabajo de campo se realizó entre noviembre
del 2004 y setiembre del 2006. El estudio estuvo dirigido por el Centro
Centroamericano de Población (CCP) en colaboración con el Instituto de
Investigaciones en Salud (INISA) y la Universidad de California,
Berkeley. Los detalles metodológicos de la recolección de datos se
encuentran en Rosero-Bixby, Dow, y Fernández (2013).
El
estudio incluyó mediciones antropométricas de los adultos mayores,
tales como el peso, la talla, la altura de la rodilla, la
circunferencia abdominal, entre otros. Para la medición de la talla se
utilizaron estadiómetros. A los adultos mayores con deformaciones en la
espina dorsal no se les midió la talla. La altura de la rodilla se
midió utilizando la pierna derecha del adulto mayor siempre y cuando no
existieran lesiones en esta parte del cuerpo; para la medición se
utilizó un cartabón para corroborar el ángulo de 90 grados en la
pierna, y luego la altura de la rodilla se midió con un estadiómetro
(Rosero-Bixby, Dow, y Fernández, 2013).
Como
se explicó en la sección anterior, la talla se puede aproximar
utilizando la altura de la rodilla y la edad del adulto mayor. Por lo
tanto, si se cuentan con medidas de la talla, altura de la rodilla, y
edad para una muestra representativa de una población determinada se
puede estimar el Modelo 1 para obtener estimaciones de los coeficientes
α0, α1, y α2.
En consecuencia, una vez estimados estos coeficientes
se utiliza la edad y altura de la rodilla de un adulto mayor con
problemas de movilidad para predecir su talla, utilizando los
coeficientes estimados del Modelo 1.
Tal y
como se mencionó al inicio del artículo, los valores estimados de
los coeficientes han sido calculados por diferentes autores utilizando
diferentes poblaciones. Para cumplir con el objetivo del artículo, se
realiza un análisis comparativo entre los diferentes valores estimados
de los coeficientes por los estudios mencionados en la parte
introductoria, todos basados en el Modelo 1.
Se
determinó como el Modelo 1a, el modelo que utiliza los coeficientes
de predicción establecidos por Chumlea, Roche, y Steinbaugh (1985), el
cual está basado en una muestra3
no
representativa de adultos
mayores de los Estados Unidos. El Modelo 1b utiliza los coeficientes de
predicción estimados por Palloni y Guend (2005) para mexicanos4,5.
El
Modelo 1c utiliza los coeficientes de predicción para
mestizos6 definidos en Palloni y
Guend
(2005). Los
modelos 1a, 1b, y 1c, se les denominó como “modelos externos” dado que
utilizan coeficientes de predicción basados en poblaciones ajenas a la
costarricense.
En la
presente investigación se estimaron nuevos coeficientes de
predicción a partir de un modelo interno, que consiste en ecuaciones de
predicción de la talla por sexo basadas en el Modelo 1, estimadas a
partir de la encuesta CRELES. El Modelo interno o Modelo 2 estima la
regresión lineal del Modelo 1 utilizando los datos de CRELES,
obteniendo nuevos coeficientes de predicción.
La
encuesta CRELES cuenta con mediciones de la talla y altura de la
rodilla para la mayoría de los entrevistados; sin embargo, una
preocupación en los estudios que utilizan medidas antropométricas, es
el error humano en la medición durante el trabajo de campo. Estos
errores en las mediciones antropométricas se corrigieron de dos formas.
Primero, para corregir o disminuir el error de medición de la altura de
la rodilla, se aprovechó el diseño longitudinal de CRELES y se utilizó
el promedio de la altura de la rodilla de las dos primeras rondas. Tal
y como se mencionó en la sección anterior, la altura de la rodilla se
mantiene relativamente constante en la adultez. Al utilizar el promedio
de la altura de la rodilla, se obtiene una medición relativamente libre
del error de medición. En lo que resta del artículo, cuando se menciona
la altura de la rodilla se refiere al promedio de la altura de la
rodilla de las dos primeras rondas.
Por
otra parte, la talla varía con el tiempo, por lo que se utilizó
otra metodología para corregir por el error de medición del
entrevistador en la talla. En una regresión lineal, la constante (α0
absorbe los efectos de variables o factores externos que no están
siendo considerados en el modelo. Si no se realiza ninguna corrección
por entrevistador en la regresión lineal, el coeficiente de la
constante (α0
absorbe el posible efecto que tenga el error por
entrevistador al realizar la medición.
Por lo
anterior, se utilizó la medida de la talla en la primera ronda,
pero se incluyó en la regresión lineal variables categóricas por
entrevistador utilizando la técnica de codificación por desviación o de
effects coding7,
obteniendo el coeficiente de la constante libre del
efecto entrevistador, tal y como se muestra en la Ecuación 2. Los
coeficientes que representan los efectos del error de medición del
entrevistador (α3,…,αN
en la ecuación 2) no son relevantes para el
presente estudio, dado que son innecesarias para la estimación de la
talla. El único objetivo de incluir estas variables categóricas por
entrevistador es eliminar el ruido del error de medición de la talla en
la constante (α0.
Por ende, en los cuadros del Modelo 2 no se reportan
los coeficientes relacionados con estas variables categóricas.
El
modelo interno y los modelos externos poseen diferentes coeficientes
de predicción (α0,
α1, y α2),
porque utilizaron datos de la altura
de la rodilla y la talla de poblaciones diferentes. Con el fin de
determinar si el Modelo 2 produce coeficientes de predicción
significativamente diferentes a los modelos externos, se realizaron
pruebas de hipótesis. Además, se realizó un análisis de residuos para
determinar cuál modelo produce los mejores estimadores de la talla. Los
residuos se definieron como la diferencia entre la talla estimada por
cada modelo y la talla observada en la primera ronda (Ŷi-Yi).
Los
modelos se comparan con la media de los residuos y los intervalos de
confianza, y los errores puros de cada modelo. Los errores puros son
una medida del desempeño de la ecuación de predicción al aplicar los
coeficientes en una muestra independiente (Guo, Chumlea, y Cockram,
1996). Entre menor sea el error puro, más precisa es la ecuación de
predicción (ver ecuación 3).
n:
número de sujetos en la muestra independiente
Yi:
talla observada
Ŷi:
talla estimada
Además,
en el Modelo 2 se estimó la raíz del error cuadrático medio
(RMSE, por sus siglas en inglés). La raíz del error cuadrático medio es
una medida de precisión de la ecuación de predicción que mide las
diferencias entre la talla estimada y observada (ver ecuación 4).
n:
número de sujetos en la muestra
p:
número de variables independientes.
Finalmente,
se realizó una validación interna con el fin de determinar
la capacidad predictiva de los coeficientes estimados en el Modelo 2.
La validación interna consistió en dividir la muestra en dos
submuestras escogidas al azar, mediante la asignación de un número
único y aleatorio a cada sujeto, se ordena la población según el número
aleatorio, y se divide por la mitad. La primera mitad de la muestra se
considera el grupo de validación y la segunda submuestra el grupo de
validación cruzada. Con el grupo de validación se estima una nueva
regresión y se obtienen nuevos coeficientes de predicción; estos
coeficientes se utilizan para estimar la talla del grupo de validación
cruzada. Luego, se comparan la talla estimada y observada en el grupo
de validación cruzada, y se analizan los errores puros.
3.Resultados
La
muestra de la encuesta CRELES es representativa a nivel nacional y
se compone de aproximadamente 3000 costarricenses nacidos antes de
1945. En el presente trabajo se utilizaron los datos de las personas
con mediciones de la altura de la rodilla en las primeras dos rondas, y
la medida de la talla de la primera ronda. Además, la muestra se depuró
para corregir por algunas incoherencias. Se excluyeron los casos en que
la razón altura de la rodilla-talla fuera menor a 0.3 o mayor o igual
0.35 para hombres. En el caso de las mujeres, se excluyeron las
personas con una razón altura de la rodilla-talla menor a 0.29 o mayor
o igual a 0.34. Estos rangos fueron determinados al analizar dónde se
concentraban la mayoría de casos, los casos excluidos se consideraron
como errores de medición que generaban ruido a la estimación al estar
fuera de la distribución. La muestra final que se utilizó fue de 2.037
personas, 936 hombres y 1101 mujeres. El Cuadro 1
presenta la
distribución por grupos de edad, sexo, nivel educativo, y estado civil.
Asimismo, en el Cuadro 2 se presenta información
sobre la talla y
altura de la rodilla de la muestra por grupos de edad.
Las
ecuaciones de predicción por sexo para el Modelo 1a, 1b, 1c, y el
Modelo 2 se presentan en el Cuadro 3. Los
coeficientes de predicción de
los modelos externos se tomaron de los artículos publicados por sus
respectivos autores. El Cuadro
4 presenta los coeficientes de
predicción del Modelo 2 calculados aplicando la regresión lineal de la
Ecuación 1 con la encuesta CRELES. Todos los coeficientes de predicción
del Modelo 2 son significativos para ambos sexos (p-value
<0.01). En la última columna del Cuadro 4 se presenta
el coeficiente de determinación (R2 ) y la raíz del error
cuadrático
medio del Modelo 2. El R2 explica la proporción de la
variancia total
de la talla que es explicada por la edad y la altura de la rodilla. En
este modelo, el R2 para hombres es de 0.72, mientras que para
mujeres es de 0.68. En lo que respecta a la raíz del error cuadrático
medio es baja para ambos sexos.
Las
Figuras 1 y 2 muestran histogramas
con las diferencias entre la
talla estimada y observada para cada modelo por sexo. Las barras del
histograma que se encuentran antes del cero representan el porcentaje
de individuos a quienes se les subestimó la talla, mientras que las
barras que se encuentran a la derecha del cero son casos en los que se
sobreestimó la talla.
Se
realizaron pruebas de hipótesis con el estadístico de Wald para
determinar si los coeficientes del Modelo 2 son significativamente
diferentes que los coeficientes de los modelos externos. El Cuadro 5
presenta los p-values para cada una de las pruebas de hipótesis. Por
ejemplo, todos los coeficientes de los modelos 1a y 1c para mujeres son
significativamente diferentes que los coeficientes del modelo interno.
Sin embargo, con un p-value de 0.661 no existen diferencias
significativas en el coeficiente de la edad entre el Modelo 1b y el
Modelo 2 para mujeres, pero entre estos dos modelos los coeficientes de
la constante y la altura de la rodilla si son significativamente
diferentes. En el caso de los modelos para hombres, todos los
coeficientes del modelo 1a y 1c son significativamente diferentes a los
estimados en el modelo interno. Los coeficientes de la constante y la
edad del Modelo 1b no son significativamente diferentes a los estimados
en el Modelo 2.
El
Cuadro 6 y la Figura 3 muestran los
resultados del análisis de
residuos donde se estimaron los residuos promedios por modelo y los
intervalos de confianza. Los residuos se estimaron como la diferencia
entre la talla estimada y observada en la primera ronda. Tal y como se
había observado en los histogramas, el primer modelo sobreestima la
talla y genera las estimaciones más sesgadas.
Los
errores puros de los modelos externos están presentados en el
Cuadro 7 son similares al RMSE del Modelo 2, lo
cual indica que las
ecuaciones de predicción del Modelo 2 producen buenas estimaciones de
la talla, probablemente atribuido a que ambas poblaciones (Modelo 2 y
la validación interna) son similares. Además, comparando los errores
puros con estudios similares (Palloni y Guend, 2005) los errores puros
obtenidos en este estudio son bajos, probablemente porque se excluyó en
gran parte el efecto entrevistador en la medición antropométrica.
El
Cuadro 7 muestra los errores puros de la talla en
la validación
interna del grupo de validación cruzada utilizando los coeficientes
estimados por el grupo de validación. El resultado de la validación es
satisfactorio. Los errores puros en la validación interna son bajos,
dado que están basados en poblaciones similares.
4.
Discusión
Los
resultados del Cuadro 4
muestran que los signos o correlaciones de
los coeficientes estimados en el Modelo 2 coinciden con los modelos
externos. La altura de la rodilla tiene una correlación positiva con la
talla, entre mayor sea la altura de la rodilla, se estima que mayor
será la talla. Respecto a la edad, la correlación es negativa, entre
mayor sea la edad se estima que menor será la talla.
Respecto
a los resultados de las Figuras
1 y 2, el
histograma del
Modelo 1a se encuentra centrado a la derecha del cero para ambos sexos,
esto significa que este modelo sobreestima la talla. Este es un
resultado esperado dado que los coeficientes del Modelo 1a están
basados en una muestra de adultos mayores de los Estados Unidos y, en
términos generales, la población norteamericana posee una razón
talla-altura de la rodilla diferente en comparación con la población de
Costa Rica. La tendencia de la distribución del diferencial entre la
talla estimada y observada en el Modelo 1b es opuesta al Modelo 1a,
dado que los histogramas del Modelo 1b para ambos sexos, se encuentran
centrados a la izquierda del cero, lo que se interpreta como una
subestimación de la talla. De los modelos externos, el que mejor
ajusta, o cuya distribución del diferencial se encuentra más centrada,
es el Modelo 1c, tanto para hombres como mujeres. El Modelo 2 es el que
posee la distribución más centrada en cero de todos los modelos y más
parecida a la normal, lo cual es un resultado esperable dado que el
modelo es endógeno y la estimación de la talla se realiza con
coeficientes de predicción basados en la talla real8.
En lo que
respecta a las pruebas de hipótesis presentadas en el Cuadro
5, se
observa que la mayoría de los coeficientes estimados en el Modelo 2 son
significativamente diferentes a los modelos externos.
El
análisis de residuos confirmó los resultados obtenidos en el
análisis de los histogramas de las distribuciones del diferencial. El
primer modelo sobreestima la talla y genera las estimaciones más
sesgadas. El Modelo 1a en promedio sobreestima la talla de los hombres
en 2.7 cm y en 4.3cm para las mujeres con un 95% de confianza. El
Modelo 1b subestima la talla en 1.6cm para los hombres y en 1.9 para
las mujeres. De los modelos externos, el Modelo 1c es el que produce
estimaciones menos sesgadas, sobreestimando la talla de los hombres en
0.8cm y la talla de las mujeres en 0.7cm. Sin embargo, ninguno de los
intervalos de confianza de los modelos externos incluye el cero,
sugiriendo que efectivamente los modelos sobreestiman o subestiman la
talla. Por su parte, el Modelo 2, o modelo interno, posee los residuos
promedios más bajos. En promedio, el Modelo 2 sobreestima la talla en
0.1cm (95%IC -0.1 a 0.3) para los hombres y en -0.1cm (95%IC -0.3 a
0.1) para las mujeres. Los intervalos de confianza del Modelo 2
sugieren que los residuos en este modelo son cercanos o igual a cero.
Los
errores puros de los tres modelos externos son altos, corroborando
que estos modelos producen estimaciones de la talla con importantes
desviaciones de la talla real. Los altos niveles de los errores puros
se atribuyen, probablemente, a diferencias étnicas entre la muestra
utilizada para estimar los coeficientes (EEUU y México) y la muestra a
la que se le aplicaron estos coeficientes (Costa Rica). En lo que
respecta a la validación interna, los coeficientes de predicción
estimados en la validación interna no son significativamente diferentes
a los coeficientes de predicción del Modelo 2, resultado que le da
solidez al Modelo 2.
5.
Conclusiones
La
talla es una medida antropométrica que permite conocer el estado
nutricional de personas adultas mayores. En el caso de los adultos
mayores con problemas de movilidad es difícil realizar una correcta
medición de la talla, por lo que se procede a estimar la talla a partir
de la altura de la rodilla y la edad. Si la talla estimada se aleja de
la verdadera medida del paciente, se pueden realizar diagnósticos
equivocados en cuanto al estado nutricional del adulto mayor. El
presente artículo plantea ecuaciones de predicción de la talla por sexo
diseñadas para la población de adultos mayores en Costa Rica, las
cuales forman una base importante para una mejor atención en salud de
los adultos mayores, y permiten estimar más adecuadamente otros
parámetros como el índice de Masa Corporal y la Tasa Metabólica Basal,
indicadores que permiten conocer más adecuadamente el peso y el
requerimiento energético del adulto mayor.
Los
coeficientes de predicción de la talla estimados en los artículos
Chumlea, Roche, y Steinbaugh (1985) y Palloni y Guend (2005) están
basados en poblaciones con importantes diferencias étnicas respecto a
la población costarricense. El análisis de residuos demostró que el
Modelo de Chumlea, Roche, y Steinbaugh (1985) al estar basado en una
población estadounidense con una razón altura de la rodilla-talla muy
diferente a la costarricense, sobreestima en gran medida la talla de
los adultos mayores de Costa Rica. Por su parte, el modelo para
mexicanos de Palloni y Guend (2005) subestima la talla de los adultos
mayores de Costa Rica, y el modelo de los mismos autores para mestizos
sobreestima la talla de los costarricenses, pero en menor medida. Sin
embargo, ninguno de los modelos externos realiza correcciones o ajustes
por el error humano en la medición de la talla y la altura de la
rodilla, lo cual genera que el coeficiente de la constante en los
modelos externos absorba el error humano de medición y produzca un
mayor error en la estimación de la talla al momento de aplicar el
modelo.
El
modelo interno estimado en el presente trabajo se basó en una
muestra representativa de los adultos mayores de Costa Rica. El modelo
interno cuenta con dos correcciones del error humano de medición: (1)
se utilizó el promedio de la altura de la rodilla de las dos primeras
rondas del estudio longitudinal CRELES, y (2) se incluyó en la
estimación de la regresión variables categóricas por cada entrevistador
codificadas por desviación, de forma que estas variables absorbieron el
efecto entrevistador, obteniendo un coeficiente de la constante libre
del efecto entrevistador. Los coeficientes de predicción estimados en
el presente estudio son, en su mayoría, significativamente diferentes a
los coeficientes de predicción de los modelos externos; el Modelo 2
genera los residuos y errores puros más pequeños. Dado que los
coeficientes de predicción de la validación interna no son
significativamente diferentes a los coeficientes de predicción del
Modelo 2, se recomienda utilizar los coeficientes de predicción del
Modelo 2 presentados en el Cuadro
4 para estimar la talla de los
adultos mayores de Costa Rica. Los coeficientes de predicción no han
sido validados para poblaciones ajenas a la de adultos mayores
costarricenses. El Modelo 2, propuesto en este artículo, es un
importante insumo para la toma de decisiones en la salud pública de
Costa Rica. El Modelo 2 permite obtener estimaciones más certeras de la
talla de los adultos mayores, lo que a su vez permite realizar mejores
estimaciones del índice de Masa Corporal y los niveles de desnutrición
de los adultos mayores. El nuevo modelo permite elaborar mejores
estadísticas de la situación nutricional de los adultos mayores
costarricenses y poder determinar las políticas públicas y protocolos
adecuados para mejorar la calidad de vida de la persona adulta mayor en
el país.
6.
Referencias
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1-9.
Agradecimientos
Los
autores agradecen al Dr. Gilbert Brenes Camacho del Centro
Centroamericano de Población (CCP) de la Universidad de Costa Rica
(UCR), y al Dr. Luis Rosero-Bixby de la Universidad de California,
Berkeley por sus valiosos comentarios durante el desarrollo de la
investigación.
Notas
1.Universidad
de Costa Rica. Centro Centroamericano de Población. COSTA
RICA. pjimenez@ccp.ucr.ac.cr
2.Investigador
independiente. COSTA RICA. achavco@gmail.com
3
Tamaño de la muestra: nhombres=160ynmujeres=130
4 El
estudio de Palloni y Guend (2005) estableció como mexicanos a
todas las personas que vivían en México en el momento del estudio,
except aquellos que se auto-reportaron como mestizos. Para mayor
información, consultar Palloni y Guend (2005).
5
Tamaño de la muestra: nhombres=414ynmujeres=629
6
Tamaño de la muestra: nhombres=170ynmujeres=319
7
Codificación por desviación: -1 categoría de referencia, 0 otra, y 1
categoría de interés. Para mayor información, consultar: Introduction
to SAS. UCLA: Statistical Consulting Group, en
http://www.ats.ucla.edu/stat/sas/notes2/
(accesado 5 de abril, 2014).
8
Para
efectos de este trabajo, se entiende como talla real o talla
verdadera la medida de la talla del adulto mayor que se encuentra en la
base de datos de la encuesta.