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Revista de Biología Tropical, ISSN: 2215-2075, Vol. 73(S1): e63681, enero-diciembre 2025 (Publicado Mar. 03, 2025)
Inuk yuwi ta = vamos a jugar con el cangrejola relación semiótica
de las primeras culturas de Mesoamérica, baja Centroamérica y Sudamérica
con los cangrejos (Decapoda: Brachyura)
Guillermo Vargas Jiménez1 https://orcid.org/0009-0002-7357-565X
Myrna Báez-Sirias1 https://orcid.org/0009-0007-8371-8155
Ingo S. Wehrtmann2,3,4 https://orcid.org/0000-0002-6826-7938
1. Asociación Proyecto Xulo, CPJ 3002848125; proyectoxulo@gmail.com (*Correspondence); myrnabaezs@gmail.com
2. Centro de Investigación en Ciencias del Mar y Limnología (CIMAR), Universidad de Costa Rica, 11501-2060 San José,
Costa Rica; ingo.wehrtmann@ucr.ac.cr
3. Museo de Zoología (MZUCR) del Centro de Investigación en Biodiversidad y Ecología Tropical (CIBET), Universidad
de Costa Rica, 11501-2060 San José, Costa Rica.
4. Escuela de Biología, Universidad de Costa Rica, 11501-2060 San José, Costa Rica.
Recibido 05-VII-2024. Corregido 21-X-2024. Aceptado 27-I-2025.
ABSTRACT
Inuk yuwi ta = let’s play with the crab - the semiotic relationship of early Mesoamerican,
lower Central and South American cultures with crabs (Decapoda: Brachyura)
Introduction: The millenary tradition of the Bribri and Cabécar culture called Ak kuk (= pull of the rock) and/or
Inuk yuwi ta (= let’s play with the crab) consists of pulling a stone from one place to another collectively. For the
Bribris it is the most important tradition and festivity. The instrument with the tied stone that they use for this
task is graphically related to one of the most present and studied symbols in the iconography in Mesoamerica:
the crossed bands.
Objective: To analyze, from an American perspective, the role of the crab (Decapoda: Brachyura) in early
American cultures, in their cultural concepts up to the present day.
Methods: The human-crab relationship in Mesoamerica, lower Central and South America was studied in
symbolism, cosmovision, cultural representations and iconography, ethnohistoric documentation, oral literature,
and interviews.
Results: The present study demonstrates a close link to the present day with crabs, since they combined the
morphology of crabs and humans and other animals to create biomorphic cultural representations, utilizing
pareidolia as a creative resource to sophisticate their iconographic language, incorporating the biology, morphol-
ogy and structural geometry of the crab as a positional and conceptual grid.
Conclusions: This study demonstrates the importance that brachyuran crabs had and still have in the first cul-
tures of The Americas, the relation with crossed bands, highlights the relevance of the knowledge regarding the
current culture of the Bribris and Cabécares deposited in the tradition Inuk yuwi ta (= lets play with the crab),
and the relation of this tradition with the collective, with the stone and with the water. This contribution allows
an approach to the way in which these decapods were reflected in the artistic, ludic manifestations as well as in
the cosmovision of the studied cultures.
Key words: crab; iconography; pareidolia; Bribri; Cabécar; Moche; crossbands; Olmec dragon; cosmic monster;
jaguar’s mouth; axe gods.
https://doi.org/10.15517/rev.biol.trop..v73iS1.63681
SUPLEMENTO
2Revista de Biología Tropical, ISSN: 2215-2075 Vol. 73(S1): e63681, enero-diciembre 2025 (Publicado Mar. 03, 2025)
Introducción a la relación
de las primeras culturas con los cangrejos
Inuk yuwi ta = vamos a jugar con el can-
grejo, es una tradición actual de los pueblos
Bribris y Cabécares, quienes están asentados
en la cordillera de Talamanca en Costa Rica.
Los Bribris están localizados en los territorios
de Salitre, Cabagra, Talamanca Bribri y Kekoldi
y los Cabécares en los territorios de Chirripó,
Ujarráz, Tayni, Talamanca Cabécar, Telire, Bajo
Chirripó, Nairi Awari y China Kicha (García
& Jaén, 2021). El espacio geográfico habitado
por estos pueblos en el presente (Bozzoli de
Wille, 1975; Martínez, 2004), así como en el
pasado reciente (Borge & Castillo 1997; Boz-
zoli-Vargas, 2010; Martínez, 2004), se vincula
con hallazgos del registro arqueológico de las
regiones culturales de Costa Rica (Fig. 1), con
datos etnográficos actuales (Bozzoli de Wille,
1975; Minelli, 1976; Stone, 1961), la tradición
oral (Bozzoli-Vargas, 2019; Jiménez & Báez,
2023; Pérez, 2013), y la lingüística histórica y
descriptiva (Constenla, 1981; Constenla, 2008;
Lehmann, 1920).
La tradición originaria “vamos a jugar
con el cangrejo, también llamada Ak kuk (La
jala de piedra), es una fiesta Bribri y Cabécar
que consiste en jalar dos piedras, una grande
y una pequeña, en un esfuerzo conjunto por
miembros de la comunidad y comunidades
vecinas (Bermúdez, 2022; Jiménez & Báez,
2023). Según los Bribris es la tradición más
importante, ya que unifica el colectivo como si
se tratara de un solo organismo, donde todas
las partes son fundamentales para llevar a cabo
esta acción simbólica que fortalece el colectivo
y es necesaria, ya que las piedras transporta-
das serán utilizadas para el procesamiento de
alimentos y plantas. Según los Bribris, la ajkö
(canasta) y las personas que la cargan forman
una sola unidad - un cangrejo, siendo la pie-
dra metafóricamente el caparazón mientras los
palos, las cuerdas y personas forman los dedos
del cangrejo, refiriéndose a las extremidades
(ver Bermúdez, 2022; Jiménez & Báez, 2023)
(entrevista a mayor Vidal, Natividad Hernández
Morales, Awá portador mayor, Cachabri, 2023).
Desde la civilización olmeca en Mesoamé-
rica (Cyphers, 1990-1994; Grove, 1970) hace
RESUMEN
Introducción: La tradición milenaria de la cultura Bribri y Cabécar llamada Ak kuk (= la jala de piedra) y/o
Inuk yuwi ta (= vamos a jugar con el cangrejo) consiste en jalar una piedra de un lugar a otro de forma colectiva.
Para los Bribris es la tradición y fiesta más importante. El instrumento con la piedra amarrada que utilizan para
esta tarea está relacionado gráficamente a uno de los símbolos más presentes y estudiados en la iconografía en
Mesoamérica: las bandas cruzadas.
Objetivo: Indagar sobre el papel del cangrejo (Decapoda: Brachyura) en las primeras culturas de América, en sus
conceptos culturales hasta la actualidad, desde una perspectiva americana.
Métodos: Se estudió la relación humana–cangrejo en Mesoamérica, baja Centroamérica y Sudamérica, en el sim-
bolismo, en la cosmovisión, en representaciones culturales e iconografía, documentación etnohistórica, literatura
oral y entrevistas.
Resultados: Las culturas estudiadas demuestran una estrecha vinculación hasta la actualidad con los cangrejos, ya
que fusionaron la morfología de los cangrejos y humana y de otros animales para crear representaciones culturales
utilizando la pareidolia como recurso creativo para sofisticar su lenguaje iconográfico, incorporando la biología,
y la geometría estructural del cangrejo como rejilla posicional y conceptual.
Conclusiones: La presente investigación demuestra la importancia que tuvieron y tienen los cangrejos Brachyura
en las primeras culturas de América, la relación con las bandas cruzadas, destaca la relevancia del conocimiento
de la cultura actual de los pueblos Bribris y Cabécares depositado en su tradición Inuk yuwi ta (= vamos a jugar
con el cangrejo), la relación de este con el colectivo, y con el agua. Este artículo permite un acercamiento a la
forma en que se plasmaron estos decápodos en las manifestaciones artísticas, lúdicas y cosmovisión de las culturas
estudiadas.
Palabras clave: cangrejo; iconografía; pareidolia; Bribri; Cabécar; Moche; bandas cruzadas; dragón olmeca; mons-
truo cósmico; boca de jaguar; dioses hacha.
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3 800 años en el Golfo de México (Cyphers,
2012), una gráfica recurrente es el glifo o repre-
sentación de bandas cruzadas (Di Castro &
Cyphers, 2006; Grove, 1970; Joralemon, 1971)
también conocida como: cruz olmeca o cruz
de San Andrés (Di Castro & Cyphers, 2006). Se
encuentra en objetos arqueológicos utilitarios
hasta los diseños más sofisticados para usos
simbólicos y rituales. Desde el preclásico tem-
prano (Magni, 2014), está presente en diferen-
tes medios plásticos: grabados sobre roca, sobre
esculturas en piedra, jade, cerámica, sellos para
aplicación corporal y objetos utilitarios. A esta
gráfica la relacionamos con la ajkö, el aparato
para jalar piedras, específicamente con la gráfi-
ca que forma el dulin kicha (cuerdas hechas de
bejuco o lianas, que amarran la piedra grande
que va suspendida en la ajkö (Fig. 2a). Esta
figura, es recurrente en representaciones del
sur del continente americano (Ballestas, 2015;
Magni, 2014), y es similar en su forma gráfica a
las bandas cruzadas y sus derivaciones gráficas
en Mesoamérica.
El contacto entre áreas culturales de la Baja
Centroamérica, Mesoamérica y Sudamérica se
manifiesta en la iconografía y en la similitud de
conceptos culturales compartidos, que nutren
estas culturas y constituyen símbolos presentes
en la iconografía desde épocas muy tempranas
(Ballestas, 2015; Braniff, 1974; Ferrero, 1981;
Ferrero, 1987; Lothrop, 1952; Magni, 2014).
Proponemos que las herramientas para
construir lenguaje y algunas de las represen-
taciones culturales icónicas en Mesoamérica,
baja Centroamérica y Sudamérica fueron: (1)
el cangrejo como rejilla posicional y (2) la
pareidolia sobre la morfología del cangrejo. La
rejilla posicional se entiende como el conjunto
de líneas que delimitan un objeto o cuerpo, un
sistema de localización de la imagen (Flores,
Fig. 1. Mapa de zonas arqueológicas de Costa Rica, basado en Murillo-Herrera (2011). Adaptado por Natalia Rodríguez;
ilustración por Natalia Rodríguez. / Fig. 1. Map of archaeological sites in Costa Rica, based on Murillo-Herrera (2011).
Adapted by Natalia Rodríguez; illustration by Natalia Rodríguez.
4Revista de Biología Tropical, ISSN: 2215-2075 Vol. 73(S1): e63681, enero-diciembre 2025 (Publicado Mar. 03, 2025)
2020). La pareidolia consiste en experimentar
patrones significativos en estímulos aleatorios
(Bednarick, 2016; Domínguez, 2016) y es una
forma de apofenia, la tendencia humana a
percibir patrones significativos en datos aleato-
rios (Bednarick, 2016). Haciendo uso de estas
herramientas depositaron en estos artefactos
parte de su cosmovisión y conocimiento del
entorno, conceptos gráficos relacionados al
colectivo, al juego, al agua, a la agricultura, a
otros animales.
Por lo tanto, la presente investigación ana-
liza el papel del cangrejo en las representaciones
de las primeras culturas e indaga sobre la rela-
ción en la iconografía de las bandas cruzadas
con el cangrejo y el concepto de colectivo desde
Fig. 2. Fotografías que muestran la forma gráfica de la Ajkö (canasta) y la acción de transportar las piedras. a Ajkö, con las
piedras amarradas con dulin kicha, cuerdas que atadas forman la figura de bandas cruzadas. Fotografía cortesía de: TC-635,
Amubri, Bribri, Talamanca, Costa Rica; septiembre 2019. b Ajkö, canasta sin piedras despuésdel transporte. Fotografía
cortesía de TC-635, Amubri, Bribri, Talamanca, Costa Rica. Septiembre 2015. c Fotograma durante el traslado de piedras
donde cobra sentido el nombre deInuk yuwi ta- vamos a jugar con el cangrejo. En ese momento se forma metafóricamente
un cangrejo, donde la canasta, con las piedras y las personas lo conforman. Salitre, Buenos Aires, Puntarenas, Costa Rica,
Fotografía por Proyecto Xulo, Julio 2022. / Fig. 2. Photographs showing the graphic form of the Ajkö (basket) and the
action of transporting the stones. a - Ajkö, with the stones tied with dulin kicha, ropes that tied together form the figure of
crossed bands. Photograph courtesy of TC-635, Amubri, Bribri, Talamanca, Costa Rica; September 2019. b - Ajkö, basket
without stones after transport. Photograph courtesy of TC-635, Amubri, Bribri, Talamanca, Costa Rica. September 2015.
c - Photogram during the transfer of stones where the name Inuk yuwi ta - lets play with the crab - makes sense. At that
moment a crab is metaphorically formed, where the basket with the stones and the people makes it up. Salitre, Buenos Aires,
Puntarenas, Costa Rica, Photograph by Proyecto Xulo, July 2022.
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un acercamiento a las representaciones artísti-
cas culturales de Meso y Sudamérica.
Introducción a los cangrejos Brachyura
Los camarones, langostas y cangrejos for-
man el grupo de Crustacea Decapoda que
actualmente consiste en más de 17 000 espe-
cies (de Grave et al., 2023). Los cangrejos
braquiuros son el grupo con el mayor número
de especies (7 683 spp.), representando 44.6 %
de la biodiversidad mundial de los decápodos
(de Grave et al., 2023). Los cangrejos viven
en una gran cantidad de hábitats y demues-
tran una enorme variabilidad en su morfología
(Davie et al., 2015). El proceso evolutivo de la
carcinización” (ver Borradaile, 1916) inclu-
ye diversas modificaciones morfológicas, sin
embargo, lo más característico es la tendencia
de una reducción marcada en tamaño y grosor
del pleon (también conocido como “abdomen
donde las hembras adultas portan sus huevos)
que se pliega ventralmente y se mantiene bajo el
cefalotórax (parte mayor del cuerpo) (Davie et
al., 2015; Guinot et al., 2013). Otras caracterís-
ticas morfológicas son los quelípedos (tenazas,
quelas o pinzas) y las patas (pereiópodos 2–5)
para caminar; las quelas pueden ser masi-
vas y poderosas o muy pequeñas y delicadas.
Los apéndices cefálicos son anténulas, antenas,
mandíbulas y dos pares de maxílulas, seguidos
en la parte torácica por tres pares de maxilí-
pedos y cinco pares de pereiópodos (P1–5),
con el P1 modificado como quelípedo (Davie
et al., 2015). El pleon de los braquiuros tiene
típicamente seis somitas y el telson. En muchas
especies de Brachyura existe un dimorfismo
sexual con respecto a la forma del pleon: los
machos tienen un pleon en forma triangular,
mientras el de las hembras suele estar amplia-
mente expandido (semicircular) para portar e
incubar los huevos.
A continuación, nos enfocamos en los
cangrejos de la familia Portunidae y los de
agua dulce porque son los grupos de cangrejos
más representados en la iconografía americana.
Los portúnidos (localmente llamados “jaibas”)
tienen el último par de patas modificado para
actuar como remos, típico para estos cangre-
jos nadadores (Schmidt et al., 2020; Williams,
1971). Por otro lado, sus tenazas son general-
mente largas y delgadas, mientras el caparazón
es ancho, con una espina prominente a cada
lado. Las “jaibas” habitan típicamente zonas
costeras. Varias especies tienen una gran impor-
tancia económica (ejemplos de Latino América:
Fischer & Wolff, 2006; Haimovici & Cardoso,
2017; Molina & Yedra, 2019; Nevárez-Martínez
et al., 2003; Palma, 1998; Perdomo et al., 2010),
incluyendo como individuos recién mudados
(inglés: “soft crabs”) (Hungria et al., 2017).
Los cangrejos de agua dulce son macroin-
vertebrados ampliamente distribuidos en zonas
tropicales y subtropicales del mundo. Estos
decápodos, completamente independiente de
aguas salobres o aguas salinas, viven en una
gran variedad de hábitats, incluyendo ríos en
zonas montañosas, lagos, humedales y hasta
cuevas; además se pueden encontrar lejos de
cuerpos de agua debido a su capacidad notable
de respiración aérea (p.ej., Cumberlidge, 1986,
Díaz & Rodríguez, 1977; Wolfe et al., 2023).
En el Neotrópico se encuentran representantes
de tres familias: Epiloboceridae, Pseudothel-
phusidae y Trichodacylidae (ver Álvarez et al.,
2021; Magalhães et al., 2015). El plan corporal
de estos cangrejos corresponde al de los otros
braquiuros con un caparazón duro expandido
y calcificado, un pleon fuertemente reducido
que se sujeta firmemente contra el esternón
torácico y ocho pares de apéndices torácicos.
La forma del caparazón es variable, en algunas
especies tiene espinas laterales (p.ej., Tricho-
dactylidae), mientras los cangrejos de Pseu-
dothelphusidae generalmente no tienen estas
espinas. La quela (primer pereiópodo) es más
grande en machos que en hembras y las quelas
de los machos adultos son marcadamente dife-
rente en tamaño, es decir, una es claramente
mayor que la otra. El pleon de los machos adul-
tos es triangular, el de las hembras adultas muy
ancho, semicircular. En contraste con la mayo-
ría de otros cangrejos, todos los cangrejos de
agua dulce tienen un desarrollo directo (no hay
larvas que naden libremente), y las crías son
pequeñas versiones de los cangrejos adultos,
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portadas por un tiempo variable por las hem-
bras (Vogt, 2013; Wehrtmann et al., 2010). Los
cangrejos de agua dulce tienen su importancia
cultural y económica; p.ej. en Guatemala existe
una pesquería de estos decápodos en el Lago
Atitlán (Wehrtmann et al., 2014) y en varios
países latinoamericanos se encuentran cangre-
jos de agua dulce ofrecidos para el consumo
humano en mercados locales (p.ej., Phillips et
al., 2019). También pueden representar una
fuente de alimentación para grupos indígenas
(Finkers, 1986; Magalhães et al., 2006). Y en
forma general, ambos, personas y cangrejos
cohabitan cerca del agua, y estas interacciones
pudieron generar relaciones culturales más allá
de la alimentación y economía.
Ak kuk, Inuk yuwi ta
Semiótica del cangrejo y el colectivo: Ak
kuk, Inuk yuwi ta, aunque parece ser una acción
simple, jalar una piedra de un lugar a otro, es
un acto de mucho simbolismo y esfuerzo colec-
tivo. Se trata de un trabajo en equipo donde los
hombres van cargando con sus manos sobre sus
hombros la ajkö, una canasta de palos donde
montan una piedra grande y una pequeña para
transportarlas y las mujeres dirigen con dulin
kicha dando estabilidad, tracción y dirección
(ver Fig. 2).
Para esta acción se sigue un orden, con
la presencia de un awá (maestro mayor de los
Bribris) o de alguien formado como jalador
y amarrador de piedra, se escogen y cortan
los bejucos y palos para la fabricación de
una estructura - canasta de palos (Fig. 2); se
seleccionan una piedra de río grande y una de
un tamaño mucho menor con características
específicas que serán utilizadas para moler
granos, tubérculos, raíces, plantas medicinales
y alimenticias. Una vez que se cuenta con los
materiales se procede a elaborar la ajkö with se
vuelcan las piedras sobre la canasta y se ama-
rran con dulin kicha. También se amarran cuer-
das largas a la estructura adelante y atrás, que
serán utilizadas en el momento de la jalada por
las mujeres. La gráfica que forman las cuerdas
en el centro de la aj-canasta sobre la piedra
grande (Fig. 2a) es una figura muy similar a la
gráfica del glifo conocido como “bandas cruza-
das” (Bermúdez, 2022; Jiménez & Báez, 2023).
Antes de alzar y transportar las piedras, se
toma blo (chicha), bebida energizante a base
de maíz preparada días antes y se realiza una
acción demostrativa donde una mujer, a la que
se le refiere como “mayora” por su conocimien-
to y quien es la que guía al colectivo, se turna
con varias mujeres tratando de jalar la ajkö con
la dulin kicha. Todas las participantes deben
realizar esta acción junto con la mayora. Los
hombres hacen una acción similar, tratando de
levantar la estructura uno por uno acompaña-
dos del awá, dando a entender la imposibilidad
de hacer esta acción entre dos personas, resal-
tando la importancia del colectivo y de cada
individuo para llevar a cabo la acción en forma
satisfactoria.
Durante el traslado los hombres cargan
la estructura sobre sus brazos y hombros diri-
gidos por el mayor mientras las mujeres jalan
y tensan las cuerdas dirigidas por una mayor
adelante y otra mayor atrás. En las subidas jalan
el dulin kicha desde arriba y con eso se alivia el
peso. Si es una bajada van haciendo contrapeso
para que no se vaya el peso de un solo lado. Se
realizan al menos cuatro descansos durante el
traslado, cruzando ríos, subiendo pendientes y
bajando barrancos, y se toma blo. Cada uno de
los pasos descritos es considerado de impor-
tancia para llevar a cabo esta acción, donde
el colectivo se ve reflejado desde la pareidolia
como cangrejo.
Resultados de entrevistas a los portado-
res de la tradición: Inuk yuwi ta: Yuwi – can-
greja, en idioma Bribri, es hembra y también
una mujer. Se encarga de proveer de agua a los
Bribris. Sibo, considerado un personaje histó-
rico y mítico relacionado al conocimiento y a
la creación (Jara, 2018), quien también jaló la
piedra y transmitió el conocimiento a los Bri-
bris, fue quien trajo a yuwi a este mundo. Sin
yuwi, el mundo no tuviera agua, no existieran
nacientes de agua, quebradas, y ríos. Se encar-
gan también de desbordar agua. La cangreja
trae el agua desde Sulakaska (lugar debajo de
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la tierra, comúnmente llamado inframundo) a
este mundo, es quien se encarga de jalar el agua
en una jícara, y es por esa razón que saca agua
por la boca (entrevista a mayor Vidal, Natividad
Hernández Morales, Awá portador mayor, y a
Horacio López Gabb, portador mayor, Cacha-
bli, 2023).
La cangreja trabaja en conjunto con otros
animales, entre ellos la hormiga bala. En la
montaña los cangrejos se encuentran dónde
están las nacientes de agua, se encargan de
mantener limpio su alrededor lo que permite
que el agua circule sin obstáculos (entrevista
a mayor Vidal, Natividad Hernández Morales,
Awá portador mayor, Cachabli, 2023). Existe
en el mundo espiritual de los Bribris cuatro
cangrejos donde nace el agua, uno a cada lado,
cuatro escondites para que salga el agua del
inframundo, una conexión desde el inframun-
do a este mundo (entrevista a mayora Ana
Ortíz Obando, Cachabli 2024, y a Horacio
López Gabb, portador mayor, Cachabli, 2024).
En Talamanca y de acuerdo a los Bribris
existen tres tipos de yuwi o cangrejos: 1. Kana
yuwi- Kana: se refiere al árbol, Bursera sima-
ruba, refiriéndose al color de este, 2. Eskukcha
yuwi: refiriéndose al color de la bolsa chacarita,
elaborada con cabuya; es la especie más peque-
ña; y 3. Mulu yuwi: mulu significa ceniza en
idioma Bribri y se refiere al color de este tipo
de cangrejo (entrevista a mayor Vidal, Nativi-
dad Hernández Morales, Awá portador mayor,
Cachabli, 2023). Según Jelki Jairo Alberto Sán-
chez Porra, portador mayor (entrevista, Salitre
2022), se encuentran caritas en el caparazón
del cangrejo. En la cosmovisión Bribri existe
una relación semiótica entre piedra y cangrejo;
ambos son seres vivos, fueron humanos, por lo
que, según el mayor Vidal Natividad, ak y yuwi
- significan piedra y cangrejo a la vez. Según el
mayor Ricardo Morales (entrevista, Cachabli
2024) es similar la importancia del cangrejo en
otras culturas de América porque Sibo estuvo
presente en otros sitios.
Similitudes entre iconografía olmeca y la
tradición Inuk yuwi ta: jaladores de piedras
La plataforma Olmeca altar 4, es una
cangreja: La plataforma conocida como Altar 4
de La Venta, México, es un monolito que perte-
nece a la cultura olmeca (Fig. 3a). El diseño del
zoomorfo se ha interpretado como monstruo
cósmico (Di Castro & Cyphers, 2006; Hernán-
dez-Lara, 2021); también se ha relacionado con
la forma gráfica de las bandas cruzadas en la
boca del mismo (Joralemon, 1971). Esta repre-
sentación la identificamos como una cangreja
adulta por la forma semicircular del abdomen;
los artistas detallaron las anténulas, ojos y boca
(Fig. 3a, Fig. 3b, Fig. 3c). Al adecuar el diseño en
la parte superior del soporte grabaron el rostro
de una cangreja y tenazas estilizadas desde una
vista frontal, y desde una vista ventral donde se
encuentra el personaje antropomorfo. Con esto
los olmecas nos comunican que se trata de una
cangreja, sugiriendo la perspectiva de la Fig. 3b.
La plataforma Altar 4 (Fig. 4b) preserva en
el costado derecho un bajo relieve con un per-
sonaje que ha sido interpretado como cautivo
(Clewlow, 1974; Grove,1970; Milbrath 1979),
también como femenino (Grove, 1973). Esta
se encuentra sosteniendo una cuerda que se
integra a modo de trenza con su brazo (Fig. 4a,
Fig. 4b) lo que recuerda a la tradición “Vamos a
jugar con el cangrejo, donde las mujeres jalan y
tensan dos cuerdas, mientras los hombres car-
gan la estructura similar a la plataforma olmeca
de potrero nuevo (Fig. 4c). Cabe destacar que,
en San Lorenzo y La Venta en México, conside-
radas las principales capitales olmecas (Arieta
& Cyphers, 2017; Cyphers, 2012), no habían
piedras volcánicas naturalmente. Estas fueron
transportadas desde largas distancias (Heizer,
1965), en promedio entre 60 y 100 km (Case-
llas, 2004; Cyphers, 1990-1994; Morante, 2022).
Se ha propuesto que las piedras eran símbolo de
poder (Cyphers, 2018), posiblemente del poder
colectivo cuyo ícono es el cangrejo, como lo es
para la cultura Bribri actualmente.
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En el caso de las representaciones en la
Fig. 4d, Fig.4e, y Fig. 4f, en Costa Rica, perte-
necientes a las regiones arqueológicas Central
y/o región Gran Nicoya, representan perso-
najes con los brazos arriba como si cargaran
una estructura. Según los Bribris las personas
en la acción de jalar la piedra son los “dedos
del cangrejo.
Dulin kicha – Bandas cruzadas: En el
preclásico temprano los olmecas representa-
ron el glifo de bandas cruzadas en el centro
de una estructura cuadrada (Fig. 5a, Fig. 5b.,
Fig. 4c), similar a la forma gráfica de la ajkö
(Fig. 5d) en la tradición “vamos a jugar con el
cangrejo”: la piedra es amarrada formando una
figura similar.
Presencia de cangrejos en documentos
En el Popol Vuh (Recinos, 2012), Guate-
mala, se hace mención de Zipacná, un gigante
soberbio que se echaba los cerros a cuestas,
que se alimentaba solo de peces y cangrejos,
y había hecho daño matando una gran can-
tidad de muchachos (conocidos como “400
muchachos”; ver Recinos, 2012). Los gemelos
Fig. 3. Comparación de la morfología entre el zoomorfo de la plataforma Altar 4 y un cangrejo Callinectes sapidus. a Dibujo
y coloración por Guillermo V. Jiménez a partir de dibujo del Altar 4 por Grove (1973). b - Fotografía de C. sapidus por
Guillermo V. Jiménez. c Fotografía de detalles de la boca de C. sapidus por Myrna Báez Sirias. d Gráfico alterado de detalle
de la boca de zoomorfo en Altar 4 por Guillermo V. Jiménez a partir del dibujo de Grove (1973). Demuestra una modificación
de la boca del zoomorfo buscando una perspectiva frontal, dando como resultado una similitud con las estructuras bucales de
un cangrejo Fig. 3c. / Fig. 3. Comparison of the morphology between the zoomorph of the Altar 4 platform and a Callinectes
sapidus crab. a - Drawing and coloring by Guillermo V. Jiménez from drawing of Altar 4 by Grove (1973). b - Photograph of
C. sapidus by Guillermo V. Jimenez. c - Photograph of details of the mouth of C. sapidus by Myrna Báez Sirias. d - Altered
graphic of zoomorph mouth detail on Altar 4 by Guillermo V. Jimenez from Groves drawing (1973). It shows a modification
of the zoomorphs mouth looking for a frontal perspective, resulting in a similarity with the mouth structures of a crab Fig. 3c.
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Hunahpú e Ixbalanque llenos de rencor deci-
den vencerlo, y para eso hicieron un cangrejo
gigante de plantas y el caparazón de piedra.
Zipacná andaba con hambre y los gemelos lo
engañaron de que habían visto un cangrejo en
el fondo del barranco. Cuando Zipacná se fue
en busca del cangrejo gigante, el cerro donde
se encontraba se derrumbó y cayó lentamente
sobre su pecho, y fue convertido en piedra,
formando parte de la montaña. Esta relación
de intercambio piedra – caparazón de cangrejo
coincide con la semiótica Bribri en la tradición
Inuk yuwi ta donde la piedra es el caparazón
del cangrejo.
En Quiché, idioma original del pueblo donde
se escribió el Popol Vuh, x – ta pe, significa mon-
taña y tap significa cangrejo. Según Ximénez y
Brasseur citado por Recinos (2012), se asocian
estas dos palabras a un mismo significado.
El texto Popol Vuh sugiere una relación
semiótica montaña-tierra-agua-cangrejo (Jimé-
nez & Báez, 2023; Peretti, 2024) y piedra; según
Ximénez (ver Peretti, 2024) el cerro se puso
sobre el agua como un cangrejo.
En un relato de la cultura Pipil en El Sal-
vador, los cangrejos ayudan a los muchachos
de la lluvia a recoger el agua en tecomates
(Schultze, 1977).
Fig. 4. Representaciones arqueológicas posiblemente relacionadas a la jala de piedra y dibujo de escena presente en la
plataforma Altar 4. a Fotografía 7953N por Justin Kerr tomada de Maya Vase, 2001-01-13. b Dibujo donde se unió la
escena presente en la plataforma Altar 4 en un solo plano por Guillermo V. Jiménez a partir de fotografía 7953N por Justin
Kerr y dibujo de Grove (1973). c Plataforma Olmeca, anteriormente conocido como Trono de Potrero Nuevo. Colección y
fotografía cortesía del Museo de Antropología de Xalapa - México. d-f Representaciones con figuras antropomorfas con los
brazos levantados como si cargaran una estructura. Colección y fotografías cortesía del Museo del Jade, INS San José - Costa
Rica. Código de registro de pieza al pie de cada imagen. / Fig. 4. Archaeological representations possibly related to the stone
pull and drawing of a scene present in the Altar 4 platform. a - Photograph 7953N by Justin Kerr taken from Maya Vase, 2001-
01-13. b - Drawing where the scene present in the Altar 4 platform was joined in a single plane by Guillermo V. Jiménez from
photograph 7953N by Justin Kerr and drawing by Grove (1973). c - Olmec platform, formerly known as Throne of Potrero
Nuevo. Collection and photograph courtesy of the Museum of Anthropology of Xalapa - Mexico. d-f - Representations with
anthropomorphic figures with arms raised as if carrying a structure. Collection and photographs courtesy of the Museo del
Jade, INS San José - Costa Rica. Piece registration code at the bottom of each image.
10 Revista de Biología Tropical, ISSN: 2215-2075 Vol. 73(S1): e63681, enero-diciembre 2025 (Publicado Mar. 03, 2025)
Los Tawahkas y los Misquitos de Honduras
utilizan una ocarina hecha de tenaza de can-
grejo para celebraciones y ceremonias, como
instrumento musical (Flores, 2003). En Subtia-
va, en Nicaragua, cerca de León, existe un mito
donde un tesoro se encuentra enterrado y el
espíritu de ese tesoro es un punche, un cangrejo
(Leytón et al., 2013).
En Costa Rica, los Bribris tienen un relato
oral sobre unos huesos sagrados llamados ,
que se obtenían en tiempos de Sibo, de anima-
les míticos gigantescos. Desaparecidos estos
animales, los son sustituidos por huesos
pequeños que se obtienen de “coyunturas” de
cangrejos y otros animales. Estos huesitos no
se deben tocar si no es una persona facultada
para tocarlos; y si se tocan, producen enferme-
dades incurables (Jara, 2018). Alrededor del
Parque Nacional La Cangreja, en el poblado
de Zapatón, hay un asentamiento Huetar, que
tienen la creencia en espíritus protectores de
la naturaleza - como el de la Cangreja (Alfaro,
2005). Los cangrejos son considerados muy
importantes para los Huetares, son los que
producen el agua al vivir en los cerros (Pérez,
2013). Los Guaymíes en Costa Rica tienen un
baile conocido como “el baile del cangrejo”; el
movimiento se efectúa de izquierda a derecha
y viceversa (Constenla, 1996), representando
la forma como se mueven los cangrejos. En
forma muy similar, los Guaymíes en Panamá
en Veraguas y Bocas del Toro cantan y bailan en
reuniones y tienen una tradición llamada jegui
que es un canto y baile en parejas que imitan a
los cangrejos (Alvarado & Ureña, 2003).
En un mito de la cultura Aguaruna, Perú,
existe una cangreja gigante, Ugkaju, madre del
agua, que llamaba al agua, que, con olas, tum-
baban y ahogaban a las aves grandes (Regan,
1999). En un relato sobre la creación del
mundo en la cultura Bora de Ampiyacu, Lore-
to, Perú, Mépiiyejii Niimúhe empezó a trabajar
Fig. 5. Fotografías que muestran evidencia cultural olmeca donde se destacó la gráfica de bandas cruzadas y detalle de Ajkö
mostrando la relación del Dulin kicha con las bandas cruzadas. a-c Esculturas olmecas con gráfica de bandas cruzadas
resaltada. Colección y fotografías cortesía del Museo de Antropología de Xalapa - México. d Detalle de la Ajkö. Fotografía
cortesía de TC-635. Código de registro de pieza al pie de cada imagen. / Fig. 5. Photographs showing Olmec cultural
evidence where the crossband graphic was highlighted and detail of Ajkö showing the relationship of the Dulin kicha with
the crossbands. a-c - Olmec sculptures with crossed bands graphic highlighted. Collection and photographs courtesy of the
Museum of Anthropology of Xalapa - Mexico. d - Detail of the Ajkö. Photograph courtesy of TC-635. Piece registration code
at the bottom of each image.
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formando la tierra. La tierra era pequeñita,
como el caparazón de un cangrejo (Espino &
Mamani, 2022).
En un relato del pueblo Pemón en Brasil,
“El juego de los ojos” cuenta que la cangreja
tiene la capacidad de enviar y regresar sus
ojos a un lago llamado Palauá (Koch-Grün-
berg, 1924), posiblemente haciendo referencia
a las características biológicas de los cangrejos
que mueven los ojos alrededor de una órbita
bastante amplia, funcionando como si fuera
un periscopio (Barnes & Barnes, 1990; Land,
2019). Las diferentes interacciones del pueblo
Yanomami, Venezuela y Brasil, con cangrejos
de agua dulce fueron descritas en diferentes
publicaciones (ver Magalhaes & Türkay, 2008).
Por ejemplo, el ritual que marca el periodo de
transición de las niñas yanomami de la región
del alto Orinoco a la edad adulta, culmina en
una cacería ceremonial de cangrejos llamada
okomou” (Herzog-Schröder, 2003).
En relatos relacionados al cangrejo, las
primeras culturas utilizaron la pareidolia para
encontrar figuras en la morfología de este ani-
mal relacionadas a su entorno. En un relato de
la cultura Pemón, Brasil, un cangrejo se tragó
un remo y por eso la paleta del remo se puede
ver al desprender el dáctilo de la tenaza ya que
su forma es similar a la pala de un remo (Koch-
Grünberg, 1924). En un mito de la cultura
Tremembé, Brasil, en el Delta del Parnaíba, el
cangrejo era un príncipe indígena; para no
olvidar la imagen del cuerpo de su amada,
decidió tatuárselo en su caparazón. Esta figura
se perpetuó a través de todas las generaciones
posteriores del cangrejo macho (Borges et al.,
2022) posiblemente refiriéndose a los relieves y
formas presentes en el caparazón de cangrejos
de tierra Ucides cordatus. El relato se ubica en
la costa noreste de Brasil en Delta do Parnaíba
donde es muy comercializada esta especie. Las
líneas naturales del caparazón son similares al
torso de una silueta femenina. En un mito de la
cultura Aguaruna, Perú, Ugkaju, una cangreja
gigante, madre del agua, se enfrentó al chuwi
(paucar) quien le clavó una lanza en su pecho,
y por esa razón a los cangrejos aún se les puede
ver la lanza saliendo de su pecho (Regan, 1999),
posiblemente refiriéndose al telson, que se
visualiza de forma triangular, como una punta
de lanza.
Cangrejos identificados en la arqueología
Pareidolia de rostros en caparazones de
cangrejo: En la región arqueológica Gran Nico-
ya, Costa Rica y Nicaragua, destacan unas
escudillas (Fig. 6) con un diseño relacionado
a cangrejos (Lothrop, 1926), algunas con un
rostro en la parte dorsal (Fig. 6b, Fig. 6c, Fig.
6d, Fig. 6e, Fig. 6g), posiblemente relacionado
al fenómeno cognitivo de la pareidolia, donde a
partir de las líneas estructurales del caparazón
interpretaron rostros. A esta configuración la
llamamos aqrostro – caparan.
La configuración rostro - caparan tam-
bién fue utilizada por los ceramistas de la cul-
tura Moche, en la costa norte del Perú (Fig. 7a,
Fig. 7b, Fig. 7c, Fig. 7e, Fig. 7f). Generalmente
representan cangrejas adultas, por la forma del
abdomen. Algunas tienen como idealización
más apéndices que los propios del cangrejo
(Fig. 7b, Fig. 7c, Fig. 7g); algunas son antro-
zoomorfas: con pies humanos mostrando el
empeine y/o cabezas antropomorfas ubicadas
donde se encuentra la boca en los cangrejos
(Fig. 7 a, Fig. 7b, Fig. 7c, Fig. 7e). Es probable
que algunas sean representaciones de especies
del género Callinectes sp. (jaibas), considerando
que representaron una forma similar de capa-
razón (Fig. 7a, Fig. 7b, Fig. 7c, Fig. 7d, Fig. 7h).
Instrumentos musicales con forma de
cangrejos: En la región arqueológica llamada
Gran Chiriquí en Costa Rica y Panamá desta-
can representaciones de cangrejos tipo Calli-
nectes, realizadas en metal con mucho realismo,
con espinas laterales y patas nadadoras (Fig. 8a,
Fig. 8b, Fig. 8c). Otro cangrejo antropomorfi-
zado con el quinto par de patas nadadoras con
dáctilos planos y con dedos se observa en Fig.
8c. La Fig. 8d y la Fig. 8e muestran dos dibujos
de ocarinas en forma de cangrejo resaltando las
tenazas, con un soporte de cuatro patas (Mac-
Curdy, 1911).
12 Revista de Biología Tropical, ISSN: 2215-2075 Vol. 73(S1): e63681, enero-diciembre 2025 (Publicado Mar. 03, 2025)
Evidencia de restos de cangrejos en
contextos arqueológicos: Estudios en Meso-
américa, baja Centroamérica y Sudamérica
reconocen a los cangrejos o partes de estos
por su perceptibilidad en las representaciones
y por su presencia en contextos arqueológicos
(Lothrop, 1926; Lothrop, 1952; Moreira, 2020;
Rodríguez-Galicia et al., 2017; Shady & Leyva,
2003; Van Akkeren, 2002; Varela-Scherrer &
González-Cruz, 2023).
Con respecto a restos arqueológicos des-
tacan en México, Teotihuacán, con diez frag-
mentos de quelas de dos especies de cangrejos,
Gecarcinus lateralis y Cardisoma guanhumi
(Rodríguez-Galicia et al., 2017). También se
han hallado más de un centenar de tenazas de
Fig. 6. Ilustraciones de cangrejos sobre escudillas de cerámica, región Gran Nicoya, corresponden al período Sapoá, 800 -
1350 e.c., tipo Papagayo Policromo. a-g Ilustraciones tomadas de Lothrop (1979). h Escudilla encontrada durante las
investigaciones de John Bransford en la isla de Ometepe, 1881. Pieza N. A028491 de la colección del Smithsonian Museum.
Fotografía cortesía de Rigoberto Navarro. i - Colección y fotografías de escudilla cortesía de Museos del Banco Central de
Costa Rica, código: BCCR-C-1723. / Fig. 6. Illustrations of crabs on ceramic bowls, Gran Nicoya region, corresponding
to the Sapoá period, 800 - 1350 c.e., Papagayo Polychrome type. a-g - Illustrations taken from Lothrop (1979). h - Bowl
found during John Bransford’s research on the island of Ometepe, 1881. Piece N. A028491 from the Smithsonian Museum
collection. Photograph courtesy of Rigoberto Navarro. i - Collection and photographs of bowl, courtesy of Museos del Banco
Central de Costa Rica, code: BCCR-C-1723.
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Revista de Biología Tropical, ISSN: 2215-2075, Vol. 73(S1): e63681, enero-diciembre 2025 (Publicado Mar. 03, 2025)
cangrejo dulceacuícola, y en depósitos rituales
en Palenque, en El Palacio, Chiapas, México,
evidencia que este decápodo además de ser
consumido por los antiguos mayas, tuvo un
papel relevante dentro de rituales relacionados
a las renovaciones constructivas. Eso demuestra
la importancia que jugó el cangrejo tanto para
la dieta como para la cosmovisión, como sím-
bolos de fertilidad y renovación (Varela Sche-
rrer & González Cruz, 2023). En Sudamérica en
Caral, Perú, fueron ofrendadas pinzas de Pla-
tyxanthus spp. en un cajón de ofrendas cons-
truido para una ceremonia ritual, vinculado al
enterramiento de un recinto (Shady & Leyva,
2003). En Guatemala los Cotzumalhuapans
seleccionaron el cangrejo como símbolo de
poder y autoridad, jugando un rol importante
en la agricultura a través de las lluvias. Además,
eso da evidencia del rol significativo de los can-
grejos en la iconografía de los Cotzumalhua-
pans, haciendo mención a cangrejos de agua
dulce (familia Pseudothelphusidae) y cangrejos
de tierra (género Gecarcinus) (Moreira, 2020).
Representaciones de cangrejo de la Baja
Centroamérica en Chichen Itzá: En el cenote
sagrado de Chichén Itzá, Yucatán, México, se
han encontrado representaciones culturales de
la región Gran Chiriquí, Costa Rica y Panamá o
Coclé y Veraguas (Lothrop, 1952). Una de estas
corresponde a un sonajero de oro (Fig. 9), con
un gráfico realizado con incisión en la parte
ventral muy similar a la gráfica que forma dulin
kicha sobre las piedras que se transportan en la
tradición Inuk yuwi ta. Moreira (2020) asoció
esta figura al quincunce mesoamericano y al
Fig. 7. Botellas de la cultura moche, Perú, con representación de cangrejos. Colección y fotografías cortesía del Museo Larco,
Lima - Perú. g presenta un gráfico de bandas cruzadas sobre el caparazón. h enseña una vista posterior del artefacto de la
Fig. 7 d, que representa un cangrejo Callinectes hembra con abdomen de un macho agregado; presenta antenas idealizadas.
Código de registro de pieza al pie de cada imagen. / Fig. 7. Bottles from the Moche culture, Peru, depicting crabs. Collection
and photographs courtesy of the Larco Museum, Lima - Peru. g - shows a graphic of crossed bands on the carapace. h - shows
a posterior view of the piece of Fig. 7 d, representing a female Callinectes crab with the abdomen of a male added; it has
idealized antennae. Piece registration code at the bottom of each image.
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Fig. 8. Representaciones de pendientes e instrumentos sonoros con forma de cangrejo, región gran Chiriquí. a
Representación cultural de cangrejo Callinectes con función de campanilla; proviene de Palmar Sur, 700 – 1550 e.c., subregión
Diquís (Snarkis, 1981). Colección y fotografía cortesía de Museos del Banco Central de Costa Rica. b Representación
cultural de campanilla con forma de cangrejo Callinectes. Colección y fotografía cortesía de Museos del Banco Central
de Costa Rica. c- Dibujo de figurilla de metal con características humano – cangrejo tomado de MacCurdy (1911). d, e
Ocarinas en forma de cangrejos, dibujos tomados de MacCurdy (1911). Código de registro de pieza al pie de cada imagen.
/ Fig. 8. Representations of pendant and sound instruments in the shape of crabs, greater Chiriqui region. a - Cultural
representation of Callinectes crab with bell function; from Palmar Sur, 700 - 1550 c.e., Diquis subregion (Snarkis, 1981).
Collection and photograph courtesy of Museos del Banco Central de Costa Rica. b - Cultural representation of a bell shaped
as a Callinectes crab. Collection and photograph courtesy of Museos del Banco Central de Costa Rica. c - Drawing of metal
figurine with human - crab characteristics taken from MacCurdy (1911). d, e - Ocarinas in the form of crabs; drawings taken
from MacCurdy (1911). Piece registration code at the bottom of each image.
Fig. 9. Dibujo de campanilla de metal con forma de cangrejo Callinectes, tomado de Lothrop (1952). / Fig. 9. Drawing of a
metal bell shaped like a Callinectes crab, taken from Lothrop (1952).
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axis mundis; símbolo que Durán (2018) asoció
a las bandas cruzadas. De forma no excluyente
se asocia las bandas cruzadas al caparazón del
cangrejo, según la semiótica Bribri (Bermúdez,
2022; Jiménez & Báez, 2023).
Quincunce
En el mundo espiritual de los Bribris hay
cuatro cangrejos donde nace el agua, uno a
cada lado. La geometría de la distribución de
los elementos de este relato oral la encontramos
coincidente con la geometría del quincunce; en
sí cuatro puntos, uno a cada lado (cuatro can-
grejos) y un punto en el centro (la naciente de
agua). Esta relación pudo haberse representado
también en otras culturas: en México, en el
sitio arqueológico olmeca Teopantecuanitlán
en la plaza central colocaron cuatro monolitos
con rostro acangrejado cerca de las esqui-
nas del patio, etapa constructiva asociada a la
construcción de una represa y canal para la
manipulación del agua. En Sudamérica en Perú,
en el sitio arqueológico Kuntur wasi 800-550
a.e.c, se representaron cuatro monolitos con
características de cangrejo (Jiménez & Báez,
2023) a los lados de la plaza central del sitio y
construyeron canales de piedra que transporta-
ban agua hacia el centro de la misma y para su
drenaje. Ambos sitios arqueológicos son consi-
derados plazas ceremoniales y monumentos al
agua (Martínez-Donjuán, 2010; Onuki, 2008).
Según los Bribris cuatro cangrejos a cada lado
de donde brota el agua es una conexión desde
el inframundo a este mundo.
Nombre de un lugar: En náhuatl, Rab’inal,
en Guatemala, era conocido como Tequicistlán,
“lugar del cangrejo. Esto se ve reflejado en el
lienzo de Quauhquechollan donde se represen-
tó en la época colonial esa área y ese lugar con
un cangrejo y un cerro en forma de campana -
el signo tradicional para “pueblo” o “lugar (Van
Akkeren, 2002). Estos dos elementos están más
separados de lo habitual pero asociados a la
misma escena. También se representó un can-
grejo sobre un cerro en el manuscrito de Glas-
gow para este mismo lugar y relato histórico.
Estilística acangrejada
Rostros acangrejados: En México, en la
cultura olmeca, se reconoce la Boca de Jaguar
(Saville, 1929) y la nariz plana como parte
de los tópicos del imaginario arqueológico
olmeca (Cyphers, 1990-1994; De la Fuente,
1987; Hernández-Lara, 2021). Estas y otras
características estéticas fueron logradas gracias
al recurso creativo de la pareidolia aplicada en
caparazones de cangrejos. Las líneas y relieves
que cubren el caparazón del cangrejo desde
una vista dorsal, funcionaron como rejilla posi-
cional para referencia de la llamada “boca de
jaguar” y la parte del caparazón que cubre el
corazón recuerda la forma de una nariz en bajo
relieve o “nariz plana” (Fig. 10).
Esta característica gráfica natural presente
en el caparazón del cangrejo la mezclaron los
creadores de estas representaciones culturales a
la estética que genera la antropomorfización de
la boca del cangrejo tipo Callinectes, desde una
vista frontal (Fig. 11 a), visualizándose en las
representaciones una línea horizontal a la altura
del labio superior, similar a la boca del cangrejo
y de la llamada “boca de jaguar” (Fig. 10e, Fig.
10h), que se llama “boca acangrejada” (Jiménez
& Báez, 2023). Dicha boca acangrejada es visi-
ble cuando es representada de perfil: el labio
superior se muestra proyectado hasta la altura
de las fosas nasales, generando una línea recta
(Fig. 11c, Fig. 11d, Fig. 11e).
Algunas representaciones olmecas presen-
tan apéndices ubicados en la parte baja de la
boca (Fig. 12b, Fig. 12c, Fig. 12e, Fig. 12f, Fig.
12h) similares en su ubicación a los maxilípe-
dos de los cangrejos (Fig. 12d). Es posible que
las antenas (Fig. 12a) también fueran tomadas
en cuenta para realizar algunas representacio-
nes saliendo de la fosa de los ojos (Fig. 12b,
Fig. 12c).
Ojos almendrados” es un término uti-
lizado para referirse a la forma de los ojos de
algunas representaciones de la cultura olmeca
(Joralemon, 1971; Saville, 1929). Es posible que
la forma de la órbita de los ojos de las jaibas
(Fig. 12g) sirvió de motivo gráfico para los “ojos
almendrados. Además, la gráfica de las fosas
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desde donde se proyectan las antenas (Fig. 12g)
también posiblemente fueron utilizadas como
órbitas de ojos para algunas representaciones
(Fig. 12 h, Fig. 12i). La forma gráfica conoci-
da como “cejas flamígeras” (Joralemon, 1971)
podría estar relacionada con la forma de las
espinas del caparazón y/o del mero del primer
par de patas (Fig. 12i) (Jiménez & Báez, 2023).
Presencia de cangrejos en hachas de
Costa Rica: En Costa Rica los llamados “dioses
hacha, 500 a.e.c – 900 e.c. (Kuboyama, 2019),
podrían haberse creado a partir de la pareido-
lia, mezclando la morfología humana de cabeza
y brazos, con la estructura del caparazón y
tenazas del cangrejo como rejilla posicional
(Fig. 13b, Fig. 13c, Fig. 13f, Fig. 13g, Fig. 13h,
Fig. 10. Comparación de las líneas de la morfología de la parte dorsal del caparazón con representaciones culturales olmecas
con boca conocida como boca de jaguar. a Detalle de dibujo de cangrejo por Emerton tomado de Goode (1884). Imagen
modificada, eliminación de apéndices. b Fotografía de Callinectes arcuatus por Guillermo V. Jiménez. c, f Se dibujó sobre
las líneas naturales del caparazón, detalle de dibujo por Emerton tomado de Goode (1884). Modificación por Guillermo
V. Jiménez. d, g Se completó las líneas sugeridas por la morfología del cangrejo y se agregaron las líneas sugeridas,
completando el diseño similar a los gráficos en las Figs. e, h. e Detalle de dibujo de monumento 15, La Venta, por Drucker
(1952). h Detalle de dibujo de hacha ceremonial olmeca por Covarrubias tomado de Piña & Covarrubias (1964). / Fig.
10. Comparison of the lines of the morphology of the dorsal part of the carapace with Olmec cultural representations with
a mouth known as jaguar mouth. a - Detail of drawing of a crab by Emerton taken from Goode (1884). Image modified,
appendages removed. b - Photograph of Callinectes arcuatus by Guillermo V. Jimenez. c, f - Drawn on the natural lines of the
carapace; detail of drawing by Emerton taken from Goode (1884). Modification by Guillermo V. Jiménez. d, g - Completed
the lines suggested by the morphology of the crab and added the suggested lines, completing the design similar to the
graphics in Figs. e, h. e - Detail of drawing of monument 15, La Venta, by Drucker (1952). h - Detail of drawing of Olmec
ceremonial axe by Covarrubias taken from Piña & Covarrubias (1964).
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Fig. 13i). Es decir, la cabeza del personaje
representado corresponde al caparazón, y los
brazos por la posición y relación con la cabeza
dan la apariencia que fueran las tenazas del
cangrejo. Desde la anatomía del cuerpo huma-
no los personajes aparentan no tener cuello; si
vemos a los cangrejos desde una vista dorsal
(Fig. 13a), la cara del personaje estaría ubicada
en el caparazón y los brazos donde están ubi-
cadas las tenazas, como si se tratase de apén-
dices cefálicos. Estos artefactos son simétricos
exceptuando los ojos que están colocados en
distintas posiciones.
La semiótica gráfica de caparazón y tena-
zas, cabeza y brazos, se utilizó adecuándose al
soporte de los formatos de los llamados “dio-
ses hachas” que denominaremos hacha yuwi.
Este diseño se adecuó sintetizando o elimina-
do la representación de las espinas laterales
del caparazón en caso de tenerlas el ejemplar
representado, posiblemente por la forma del
soporte, economía del material y ergonomía de
los diseños.
En Fig. 13 b y Fig. 13c el soporte no corres-
ponde a hachas; los artistas detallaron la confi-
guración caparazón y tenazas, cabeza y brazos,
Fig. 11. Comparación de la morfología de boca del cangrejo y la boca acangrejada con labio respingado en representaciones
culturales olmecas. a Fotografía de Callinectes sapidus desde vista frontal por Guillermo V. Jiménez, 2022. b Fotografía
de C. sapidus desde vista lateral por Guillermo V. Jiménez, 2022. c Gráfico con boca acangrejada en la mejilla derecha de
una cabeza de figurilla de jadeíta con características olmecas. Fotografía tomada de Saville (1929). d “Máscara” olmeca
con boca acangrejada. Fotografía 8062b por Justin Kerr, tomada de: Maya Vase. e Boca acangrejada en un cuenco de
cerámica. Este labio genera una línea recta y una caída similar a la boca de los cangrejos en Figs. a, b. Fotografía tomada
de Piña & Covarrubias (1964). / Fig. 11. Comparison of crab mouth morphology and crab-like mouth with upturned lip
in Olmec cultural representations. a - Photograph of Callinectes sapidus from frontal view by Guillermo V. Jiménez, 2022.
b - Photograph of C. sapidus from lateral view by Guillermo V. Jiménez, 2022. c - Graphic with crab-like mouth on the right
cheek of a jadeite figurine head with Olmec characteristics. Photograph taken from Saville (1929). d - Olmec “mask” with
crab-like mouth. Photograph 8062b by Justin Kerr, taken from: Maya Vase. e – Crab-like mouth on a ceramic bowl. This lip
generates a straight line and a drop similar to the crab mouth in Figs. a, b. Photograph taken from Piña & Covarrubias (1964).
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ambas presentan ápices a los lados del rostro.
En el caso de Fig. 13 b detallaron los ojos del
cangrejo (ver detalle fig. 13 d).
Las representaciones en las Fig. 13f, Fig.
13g, Fig. 13h, y Fig. 13i demuestran un soporte
con formato de media hacha utilitaria (Kubo-
yama, 2019) donde se aprovechó el diseño
superior del hacha como si fuera la forma semi-
circular del abdomen de una cangreja adulta,
con líneas horizontales similar a la gráfica
Fig. 12. Comparación de la morfología y apéndices frontales del cangrejo Callinectes con representaciones culturales olmecas.
a, d, g Fotografías de cangrejo Callinectes sapidus por Guillermo V. Jiménez, 2022. b, c, e, f Dibujos de representaciones
olmecas tomados de Joralemon (1971). h Dibujo de hacha olmeca por Covarrubias tomado de Piña & Covarrubias
(1964), conocida como “hacha kunz. Colección del American Museum of Natural History, New York. i Dibujo de hacha
olmeca conocida como “hacha ceremonial” de Piña & Covarrubias (1964), Colección British Museum, código: Am, St.536.
/ Fig. 12. Comparison of Callinectes crab morphology and frontal appendages with Olmec cultural representations. a, d, g -
Photographs of Callinectes sapidus crab by Guillermo V. Jiménez, 2022. b, c, e, f - Drawings of Olmec representations taken
from Joralemon (1971). h - Drawing of Olmec axe by Covarrubias taken from Piña & Covarrubias (1964), known as “kunz
axe. Collection of the American Museum of Natural History, New York. i - Drawing of Olmec axe known as “ceremonial axe
by Piña & Covarrubias (1964), British Museum Collection, code: Am, St.536.
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Revista de Biología Tropical, ISSN: 2215-2075, Vol. 73(S1): e63681, enero-diciembre 2025 (Publicado Mar. 03, 2025)
de las somitas delimitando el rostro que fue
representado donde se ubica el caparazón. Las
Fig. 13h, y Fig. 13i presentan glifos en la boca,
gráfica que interpretamos como agua saliendo
de la boca, lo que vinculamos con la relación
que hacen los Bribris, Cabécar y Huetares con
los cangrejos y la creación del agua. El hacha de
Fig. 13j demuestra un glifo de dulin kicha.
Representaciones antrozoomorfas con
manos/brazos de diferentes tamaños: En dife-
rentes culturas de México (Fig. 14b), Nicaragua
(Fig. 14c), Colombia (Fig. 14d, Fig. 14e, Fig.
14f), y Costa Rica (Fig. 14i), se encuentran
representaciones antrozoomorfas con brazos
de diferentes tamaños, posiblemente haciendo
alusión a la característica que tienen algunos
Fig. 13. Comparación de hembra adulta de Callinectes con representaciones arqueológicas de región Gran Nicoya y región
Central, Costa Rica. a - Foto 159924838 de ejemplar de C. sapidus por Cindy O’Leary. Tomada de inaturalist. https://costarica.
inaturalist.org/observations/159924838. b-i Pendientes de piedra con representación humana – cangrejo. Colección y
fotografías cortesía del Museo del Jade, INS San José - Costa Rica. d, e - Resalto de gráfico facial por Guillermo V. Jiménez.
j – Pendiente de piedra con gráfica de dulin kicha. Colección y fotografías cortesía del Museo del Jade, INS San José - Costa
Rica. Código de registro de pieza al pie de cada imagen. / Fig. 13. Comparison of adult female Callinectes with archaeological
representations from Gran Nicoya and Central region, Costa Rica. a - Photo 159924838 of a C. sapidus specimen by Cindy
O’Leary. Taken from iNaturalist. https://costarica.inaturalist.org/observations/159924838. b-i - Stone pendants with human
- crab representation. Collection and photographs courtesy of Museo del Jade, INS San Jose - Costa Rica. d, e - Highlight of
facial graphic by Guillermo V. Jimenez. j - Stone pendants with dulin kicha graphic. Collection and photographs courtesy of
the Jade Museum, INS San José - Costa Rica. Piece registration code at the bottom of each image.
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cangrejos Brachyura que presentan una tenaza
más grande que la otra (ver Fig. 14a). Todas
estas piezas presentan una configuración de
cabeza y brazos, caparazón y tenazas (Fig. 14).
Dentro de la escultórica de la cultura lla-
mada San Agustín, Colombia, destacan las
representaciones culturales 161 y 162 (Fig. 14e,
Fig. 14f) porque aún mantienen parte del color
que podrían estar relacionadas a los colores de
algunos cangrejos. Estas figuras fueron instala-
das debajo de una estructura de piedras en su
contexto arqueológico (Cubillos, 1986) como
se encuentran algunas veces los cangrejos en
su hábitat, debajo de piedras. Las Fig. 14e,
Fig. 14. Características morfológicas de cangrejos Brachyura presentes en representaciones arqueológicas de Latinoamérica.
a – Fotografía 5431387 de un ejemplar de Cardisoma guanhumi por David Knott tomada de Forestry images. https://
www.forestryimages.org/browse/detail.cfm?imgnum=5431387#javascript:fullscreen b – Dibujo del monumento 41, México,
San Lorenzo, Veracruz por Felipe Dávalos tomado de Hernández-Lara (2021). c – Dibujo de una escultura del Pacífico de
Nicaragua, tomado de Strong (1948). d – Representación de la cultura San Agustín, presenta extremidades desproporcionadas,
dibujo tomado de Dellenback (2012). e, f – Esculturas del sitio arqueológico de El Purutal, Colombia. Fotografías Cortesía del
Instituto Colombiano de Antropología e Historia. g, h – Escultura olmeca y detalles de mano. Colección del Museo Nacional
de Antropología. Fotografía por Guillermo V. Jiménez. México, 2022. i – Colgante con características homínido – cangrejo.
Colección y fotografía cortesía del Museo del Jade, INS San José - Costa Rica. / Fig. 14. Morphological characteristics of
brachyuran crabs present in archaeological representations from Latin America. a - Photograph 5431387 of a specimen of
Cardisoma guanhumi by David Knott taken from Forestry images. https://www.forestryimages.org/browse/detail.cfm? img
num=5431387#javascript:fullscreen b - Drawing of the monument 41, Mexico, San Lorenzo, Veracruz by Felipe Dávalos
taken from Hernández-Lara (2021). c - Drawing of a sculpture from the Pacific of Nicaragua, taken from Strong (1948).
d - Representation of the San Agustín culture, shows disproportionate limbs, drawing taken from Dellenback (2012). e,
f - Sculptures from the archaeological site of El Purutal, Colombia. Photographs courtesy of the Colombian Institute of
Anthropology and History. g, h - Olmec sculpture and hand details. Collection of the National Museum of Anthropology.
Photograph by Guillermo V. Jiménez. Mexico, 2022. i - Pendant with hominid - crab features. Collection and photograph
courtesy of the Jade Museum, INS San José - Costa Rica.
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Fig. 14f sostienen una figura de un tamaño y
forma que recuerda a una versión minúscula de
un cangrejo.
La Fig. 14g representa un personaje con
una de sus manos que termina en tenaza (ver
también detalles Fig. 14h). La Fig. 14i es un
colgante de jadeíta y representa una figura
antrozoomorfa posiblemente con rasgos de
mono y cangrejo, con extremidad izquierda
desproporcionada y la derecha termina en sín-
tesis de tenaza.
Cangrejo en metate de panel colgante: En
la evidencia arqueológica de la región central
de Costa Rica, región que geográficamente
coincide con el territorio actual donde habitan
los Bribris y Cabécares, destacan los metates
de panel colgante. Dentro de ellos se encuentra
uno donde un cangrejo soporta en el caparazón
un zoomorfo parecido a un mono (Fig. 15). La
posición del cangrejo en la composición sugiere
que está soportando la escena. Es posible que
en su contexto utilitario - ritual su montaje
diera ese efecto visual. La batea de la escultura
es similar a las bateas de los metates utilitarios
de la región central de Costa Rica, vinculando
la piedra, en la tradición “vamos a jugar con
el cangrejo” por su uso simbólico compartido
como una batea, o soporte de moler sobre la
piedra – caparazón de un cangrejo.
Aspectos biológicos del cangrejo tomados
en cuenta en las representaciones culturales
de las primeras culturas de América
A partir del estudio de representaciones
culturales en América identificamos caracte-
rísticas biológicas ligadas a la morfología del
cangrejo presentes en las diversas culturas de
América. Estas se encuentran en los artefactos
arqueológicos en los diferentes períodos cultu-
rales de América.
Fig. 15. Metate ceremonial de panel colgante, región central, Costa Rica, 200 - 300 e. c. Colección y fotografía cortesía de The
New Orleans Museum of Art: compra del museo a través del Fondo de Subastas de Museos de 1965,67.34. / Fig. 15. Flying
panel ceremonial metate, central region, Costa Rica, 200 - 300 c. e. Collection and photograph courtesy of The New Orleans
Museum of Art: museum purchase through the 1965 Museum Auction Fund, 67.34.
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Estrabismo: Los cangrejos tienen ojos
pedunculados que pueden mover en distintas
direcciones de su órbita y sin coincidencia si así
lo requieren (Paul et al., 1998). Esta característi-
ca posiblemente se reflejó en muchas represen-
taciones culturales de América desde la cultura
Caral en la costa norte de Perú, donde fueron
representadas figuras de barro con estrabismo
(Jiménez & Báez, 2023). En Mesoamérica desde
el preclásico se representó este aspecto estético
en todas las cabezas colosales (Cyphers, 2018)
y la gran mayoría de representaciones olmecas.
El estrabismo fue apreciado entre los mayas en
Yucatán hasta la época colonial (Landa, 1994),
en Colombia en la cultura San Agustín destaca
este patrón estético en las esculturas (Jiménez
& Báez, 2023).
Órbita de ojos: La órbita de los ojos que en
los cangrejos se presenta como una oquedad se
ve reflejada en las 16 figurillas antropomorfas
presentes en la Ofrenda 4 de La Venta, Tabasco,
al resguardo del Museo Nacional de Antropo-
logía, México, y en representaciones culturales
de algunos de los ejemplos utilizados para este
planteamiento, sobre todo aquellos que lo per-
mitían sin afectar la función de la pieza y que
fueron trabajados en piedra como por ejemplo
en las hachas yuwi (Fig. 13) y las representacio-
nes en la Fig. 11c y Fig. 11d.
La muda del exoesqueleto: La caracte-
rística biológica de los cangrejos de mudar el
exoesqueleto para crecer, fue utilizada como
concepto en representaciones olmecas, como
en el personaje conocido como sacerdote de
Atlihuayán que se encuentra al resguardo del
Museo Nacional de Antropología, México; la
figurilla 04016 de procedencia de arroyo pes-
quero en resguardo del Museo de Antropología
de Xalapa, y en el mural C-1 de Oxtotitlán
(Jiménez & Báez, 2023). Para los mayas esta
característica biológica de crecimiento fue de
importancia (Moreira, 2020; Peretti, 2024).
De igual manera las etapas constructivas en
estructuras piramidales pueden reflejar esta
idea de un cuerpo que contiene otro cuerpo,
visualmente similar en el momento de la muda,
relación semiótica de crecimiento estructural
y social, práctica común en las civilizaciones
mesoamericanas y sudamericanas desde el pre-
clásico hasta el siglo XVI.
Dimorfismo sexual del cangrejo en
representaciones culturales: El dimorfismo
sexual entre cangrejos Brachyura es notorio:
en el caso de los machos de Callinectes spp.
tienen el abdomen en forma de T invertida y
en el caso de las hembras el abdomen cuando
son juveniles tiene forma de triángulo y cuan-
do son adultas es semicircular. Ejemplo de esta
característica se encuentra en la cangreja adulta
presente en la plataforma conocida como altar
4 olmeca (Fig. 3), en el cuerpo graficado que
cubre al sacerdote de Atlihuayán, en la figurilla
04016 de procedencia de arroyo pesquero, en
las hachas yuwi de Costa Rica (Fig. 13) y en las
representaciones moches de cangrejos (Fig. 7),
generalmente representan el abdomen de las
hembras adultas con pocas excepciones (Jimé-
nez & Báez, 2023).
Conclusiones
Inuk yuwi ta - vamos a jugar con el cangre-
jo – es un ejemplo de la gran importancia de los
cangrejos en la cultura Bribri. Es un concepto
que en América pudo haberse generado desde
las culturas cazadoras - recolectoras al momen-
to de unirse el colectivo y movilizar bienes
comunes que lo requirieron por su tamaño,
por ejemplo, botes para la navegación o presas
como un gliptodonte a un lugar conveniente.
Como hemos demostrado la tradición Inuk
yuwi ta mantiene una serie de códigos para
el entendimiento iconográfico de las culturas
estudiadas. Considerando la importancia de
esta tradición milenaria, se deben iniciar los
trámites pertinentes para asegurar la preserva-
ción a nivel nacional y regional.
Dulin kicha/ bandas cruzadas, según nues-
tra interpretación desde la semiótica bribri es
un elemento simbólico que afirma y fija la pie-
dra (caparazón del cangrejo) a la ajkö – canasta
para piedras, asegurando el traslado que se
realiza en un esfuerzo colectivo. La figura del
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Revista de Biología Tropical, ISSN: 2215-2075, Vol. 73(S1): e63681, enero-diciembre 2025 (Publicado Mar. 03, 2025)
dulin kicha sobre la piedra son bandas cruzadas
que amarran la piedra, que es a la vez el capa-
razón del cangrejo. Este intercambio simbólico
y conceptual se ve reflejado en el monolito
olmeca “monumento 11 de Reynosa, Escuintla,
Guatemala; donde representaron el símbolo de
bandas cruzadas en la mayor parte del soporte
(Chinchilla & Mejía, 2018), y desde una vista
frontal un zoomorfo con características de can-
grejo (Jiménez & Báez, 2023), elementos que
asociamos a la semiótica Bribri en la tradición
Inuk yuwi ta. En baja Centroamérica encon-
tramos esta relación en su ubicación sobre el
soporte del hacha yuwi (Fig. 13 j); también en el
cangrejo - campanilla de oro que fue rescatada
del cenote sagrado de Chichen Itzá (Fig. 9), ubi-
cadas en la parte abdominal de la representa-
ción, y en Sudamérica en la cultura moche (Fig.
7g). La forma visual de esta tecnología paso a
ser relacionada al individuo, al bien común,
y a una serie de derivaciones gráficas y signi-
ficativas a estas sociedades donde el cangrejo
tuvo y tiene mucha importancia simbólica con
relación a la colectividad, a la piedra, al agua y
la cosmovisión.
Los Bribris son guardianes del agua, y a
está la relacionan a los cangrejos, vinculándolos
a su creación, limpieza, preservación, compor-
tamiento y cosmovisión. Cabe destacar que
las representaciones de las culturas estudiadas
fueron realizadas en tiempos agrícolas que al
igual que hoy el manejo del agua era y es de
vital importancia, fundamental para la sobre-
vivencia, lo que redimensiona la semiótica con
los cangrejos para estas culturas. Hoy día el mal
manejo del agua debido a la agricultura exten-
siva, industria hidroeléctrica y la usurpación y
apropiación de los territorios indígenas en Lati-
no América han perjudicado el recurso hídrico
y con ello el ecosistema; ocasionando el despla-
zamiento forzado de comunidades, rompiendo
lazos comunitarios, y destruyendo la cultura de
los pueblos (Gómez et al., 2014).
Marshall H. Saville publicó en 1929 un
estudio sobre la iconografía que hoy cono-
cemos como Olmeca. Esta fue interpretada
de naturaleza felina, aunque Bonifaz (1996)
demostró que no es así, señalando que no
tienen colmillos, forzando la relación con la
serpiente. Han sido estos dos animales los que
más se asocian a esta estética. Sin embargo,
la presente investigación demuestra la impor-
tancia que tuvieron y tienen los cangrejos,
especialmente las jaibas (Callinectes spp.) en
la cultura y estilística llamada Olmeca y la
forma en que se plasmaron estos decápodos en
sus manifestaciones artísticas, lúdicas y en la
cosmovisión.
Reflexionar en torno a las primeras cul-
turas de América, sus similitudes y diferencias
culturales ha ocupado a la comunidad antro-
pológica mundial. Covarrubias (1942) presentó
un gráfico de rostros que relacionó al jaguar
abarcando los períodos culturales y estilísticos
de Mesoamérica. Paul Kirchhoff (1943), rela-
cionaba las tradiciones culturales de América,
sus similitudes y diferencias; ha sido este un
tema de debate e investigación hasta la actuali-
dad (ej. López-Austin & Millones, 2015), y en la
presente investigación proponemos una unidad
iconográfica americana relacionada al cangrejo.
Este permitió por su morfología y comporta-
miento biológico la sofisticación del lenguaje
plástico y su función como modelo cosmogó-
nico, proyectándose la morfología humana y de
otros animales.
Este artículo ha compilado una serie de
evidencias de la presencia e importancia de los
cangrejos en las tradiciones, escritos, diferentes
tipos de artefactos, etc. de las primeras culturas.
La importancia de los cangrejos documentada a
través de los ejemplos explicados en el presente
trabajo coincide con observaciones similares
citadas anteriormente.
Futuras investigaciones para avanzar en la
relación iconográfica, cosmogónica, y concep-
tual de las primeras culturas con los cangre-
jos deberían tener enfoques interdisciplinarios
que integren perspectivas de la antropología,
biología, semiótica, lingüística, arqueozoología
y arqueología. Estas investigaciones podrían
profundizar los análisis comparativos entre
las representaciones de cangrejos en diferentes
culturas, lo que podría generar ideas nuevas
p.ej. sobre intercambios culturales. También
sería importante promover estudios sobre la
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relevancia e importancia cultural de los cangre-
jos en regiones poco estudiadas, por ejemplo,
de culturas de Sudamérica y el Caribe. Por
otro lado, estudios futuros de sitios y artefactos
arqueológicos relacionados con cangrejos debe-
rían aprovechar mejores tecnologías modernas
como por ejemplo el escaneo 3D, la cartografía
GIS y/o el análisis molecular. Los resultados de
estas investigaciones podrían generar nuevos
conocimientos que sirven para acercarnos a
comprender estas antiguas y actuales sensibi-
lidades que a pesar de la historia han logrado
preservarse gracias a la resistencia de las comu-
nidades autóctonas y a pesar del brutal colo-
nialismo desde el siglo XVI (Solórzano, 1992;
Todorov, 1982).
Finalmente, sugerimos trabajar en conjun-
to con las comunidades auctonas como entes
generadoras de conocimiento y aprendizaje,
que con la academia en búsqueda del mismo
pueden lograr avanzar en la comprensión y
reforzamiento de las primeras culturas en Costa
Rica y el continente americano y su relación
con el entorno incluyendo los cangrejos.
Esperamos que nuestras interpretacio-
nes puedan abrir espacios de conversación,
intercambio, discusión y motivar más inves-
tigaciones sobre el rol de los cangrejos y las
culturas autóctonas de América y con ello
reforzar la cultura.
Declaración de ética: los autores declaran
que todos están de acuerdo con esta publica-
ción y que han hecho aportes que justifican
su autoría; que no hay conflicto de interés de
ningún tipo; y que han cumplido con todos
los requisitos y procedimientos éticos y legales
pertinentes. Todas las fuentes de financiamien-
to se detallan plena y claramente en la sección
de agradecimientos. El respectivo documento
legal firmado se encuentra en los archivos de
la revista.
AGRADECIMIENTOS
Agradecemos en forma muy especial a las
mayoras y mayores del pueblo Bribri: mayora
Ana Ortíz Obando; a los Awás, portadores
mayores: Ricardo Morales y Vidal Natividad
Hernández Morales; a los portadores mayores:
Horacio López Gabb y Jelki Jairo Alberto Sán-
chez Porra y al Consejo Ditso Iriria Ajkonuk
Wakpa, por compartir conocimiento y el legado
de las primeras culturas. Manuel Bermúdez
por apoyar y discutir el planteamiento. Rigo-
berto Navarro Genie por realizar ficha técnica
para representaciones arqueológicas de la Gran
Nicoya en Fig. 3. Alexander Villegas por la
actualización de fichas técnicas para represen-
taciones arqueológicas de Costa Rica en Figs.
14 y 15. Museo del Jade, San José, Costa Rica;
Museos del Banco Central, Costa Rica; Museo
Larco, Lima - Perú; Museo de Antropología de
Xalapa - México; New Orleans Museum of Art,
EE.UU.; Instituto Colombiano de Antropolo-
gía e Historia, Colombia; Maya Vase y Justin
Kerr, Vicerrectoría de Acción Social, Universi-
dad de Costa Rica, por facilitarnos fotografías.
Raúl Valadez, Ann Cyphers, Virginia Arie-
ta, Carlos Varela, Fernando Moreira, Martin
Künne, Mario Bellatin, Víctor Santana, Zairong
Xiang y Julio Arias por discutir con nosotros
el planteamiento y este último por su apoyo
como consultor filológico en la introducción.
Natalia Rodríguez por diseño de mapa (Fig.
1). Agradecemos a Jurgen Ureña por la invi-
tación a su programa de radio “La Telaraña
donde se conocieron los autores GVJ e ISW
y donde nació la idea de preparar esta contri-
bución. Estamos agradecidos por los comen-
tarios constructivos recibidos por parte de dos
revisores; sus sugerencias nos sirvieron para
mejorar el texto.
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