Entrevista

La Masonería en Málaga a finales del XIX

Juan Ramón Ojeda García

Universidad de Sevilla, España

juanramon6590@gmail.com

ORCID: 0000-0003-4526-722X

Recepción: 15 de noviembre de 2021/Aceptación: 30 de noviembre de 2021
doi: https://doi.org/10.15517/rehmlac+.v14i1.49179

Tesis de doctorado en Historia defendida en la Universidad de Sevilla en España, el 5 de julio de 2021.

¿Cuáles fueron los motivos que le llevó a enfocar su investigación hacia la masonería?

Como todo proyecto de investigación tiene un comienzo o un motivante que impulsa el desarrollo de ella misma, el mío era la culminación de mi formación en historia con una tesis doctoral. Un objetivo que tenía ya presente desde mi entrada en la universidad para estudiar dicha licenciatura en 2008. Por ello, a lo largo de la carrera como es normal y suele suceder a la gran mayoría de estudiantes, a medida que vas conociendo nuevos aspectos y adquiriendo nuevos conocimientos, son muchas las temáticas que van atrayendo tu atención y sobre todo las que deseas saber más. Así, a lo largo de mis cinco años de estudio en la licenciatura, fueron principalmente dos las líneas o temáticas que despertaron en mí especial interés y sobre las que deseaba leer todo lo posible, así como iniciar una investigación. Estos dos temas eran Asia oriental y la masonería.

Por ello, una vez llegado el momento de iniciar la tesis doctoral, consideré que la masonería era la temática más idónea debido a que el Departamento de Historia Contemporánea de la Universidad de Sevilla, al cual me uní por un contrato predoctoral PIF, contaba con grandes especialistas en la materia, los cuales podrían guiar mi investigación de la mejor forma posible, como así fue.

El porqué en sí me despertaba tanto interés el tema, es porque considero que al igual que sucede con Asia oriental, son aspectos que aún no están tratados de la misma forma que otros. Es cierto, que en cuanto a masonería se ha venido trabajando en los últimos 40 años, haciendo que su estudio se vaya integrando en los centros académicos. Sin embargo, a nivel general, sigue siendo un tema sobre el que se conoce bastante poco entre la población en general, estando ese poco conocimiento que poseen muy afectado por las visiones deformadas sobre ella. Por ende, me interesaba conocer la visión académica de dicho fenómeno, pasando con el tiempo a desear contribuir desde el mundo académico a su mayor conocimiento histórico; puesto que considero que es un fenómeno fundamental para el conocimiento del mundo contemporáneo.

¿Cuáles fueron las fuentes que ha utilizado?

Todas las fuentes consultadas, o sino su gran mayoría, se encuentran en el Centro Documental de la Memoria Histórica (CDMH) de Salamanca. Allí, por cuestiones ya conocidas por los especialistas y ligadas a la represión que sufrió la orden durante y tras la guerra civil española, fueron a parar las fuentes requisadas pertenecientes a la masonería. Por ello, dicho archivo es un tesoro para los investigadores.

Dentro de las fuentes existentes, consulté aquellas que estaban relacionadas con la temática de mi tesis, titulada “La Masonería en Málaga a finales del siglo XIX”, revisando para ello cuatro grandes grupos de fuentes:

Esas fueron las fuentes documentales fundamentales, que permitieron la realización de la investigación.

¿Cuáles fueron las principales dificultades con las que se ha encontrado? ¿Cómo las ha superado?

Principalmente, los denominados “vacíos documentales” a la hora de reconstruir la historia de la vida interna de los talleres, algo que suele ser frecuente en el estudio de las logias de cualquier zona española, puesto que está directamente relacionado con la forma en la que los organismos de represión reunieron las fuentes. De tal modo, que debemos entender que muchas de las fuentes serían destruidas por los talleres, antes de que les fueran requisadas, otras simplemente se perdieron junto con las logias (ante la vida efímera e inconstante de muchos de esos talleres) o fueron extraviadas en el proceso de requisa. Sea como sea, eso nos supuso una clara serie de dificultades, que buscamos ir superando con la contrastación de diversas fuentes y la comparación de ellas; puesto que, algunos de esos vacíos, se pudieron cubrir con ayuda de la consulta de boletines pertenecientes a los orientes o en los expedientes de dichos masones.

¿Cuáles fueron las principales problemáticas históricas que su trabajo ha resuelto?

La tesis doctoral buscaba desde el primer momento integrarse en la corriente de estudios académicos de los últimos años, que bajo la tutela y guía del CEHME, busca cumplimentar el conocimiento de la masonería española, con determinados estudios regionales y locales, que, con sus aspectos globales y particulares, permitan la conformación de dicho conocimiento general. Es decir, pretende ser una de las piezas del puzle, que, con su integración entre las ya existentes, busque contribuir en el conocimiento histórico de la masonería. Lógicamente, había zonas mejor estudiadas que otras, o que contaban con estudios más recientes. Sin embargo, Málaga, cuya provincia era la tercera en importancia (cuantitativamente hablando) dentro de Andalucía (a su vez de las más destacadas dentro del país), necesitaba de una revisión, que aplicara la metodología más reciente y permitiera conocer si reflejaba o no aspectos generales ya conocidos, o aportaba incluso otros nuevos. Por ello, con nuestro estudio hemos conseguido ampliar el número de masones conocidos en dicha provincia, así como aportar una visión más novedosa y revisada del fenómeno masónico en Málaga.

¿Por favor, podría resumir la esencia de su tesis en dos líneas?

Prácticamente, como hemos afirmado anteriormente, la tesis pretende aportar una visión más renovada de la masonería malagueña a finales del siglo XIX (etapa dorada).

¿Cuáles fueron las lecciones, a todos los niveles, personal y profesional, que usted ha deducido de su experiencia investigativa?

Como toda investigación, una tesis doctoral posee varias etapas entre las que se encuentra un comienzo, un núcleo y un final. Son etapas particulares y cada una con sus aspectos propios, en los que tanto a nivel personal como profesional se va evolucionando. Es un arduo trabajo, que lógicamente posee unas etapas muy complicadas y con determinados obstáculos, que uno debe ir superando para no estancarse y seguir haciendo posible el desarrollo de ella. Como debe entenderse, a nivel profesional es la cima de todo proceso de formación investigadora, al ser una auténtica “prueba de fuego” que acaba formando al investigador. Y a nivel personal, ha supuesto el logro de un objetivo que como dije anteriormente me marqué a comienzos de mis estudios. Sin embargo, si algo he podido corroborar en esta etapa y sacar alguna lección, ha sido la de no verse frenado por ningún obstáculo ni que ello nos lleve al estancamiento, las dificultades están ahí, pero debemos de ingeniárnosla para superarlas.

¿Ahora, cuáles son sus proyectos profesionales?

Profesionalmente, me gustaría seguir formando parte del mundo universitario, puesto que en él es donde realmente puedo cubrir con mayor facilidad mis dos pasiones: la docencia y la investigación. Más particularmente hablando, me gustaría seguir investigando sobre la masonería, así como sobre Asia oriental; buscando, incluso ligar ambas facetas. En definitiva, buscar que la tesis doctoral sea el comienzo de la etapa investigadora en sí, entendiéndola como un punto importante en la formación.

¿Quisiera destacar algún aspecto que no se ha contemplado y que usted consideraría digno de reseñar?

Simplemente me gustaría aprovechar estas líneas para agradecer a la REHMLAC+, el que se haya acordado de un simple y novato investigador como yo. Considero que la masonería debe ser poco a poco más estudiada en el mundo académico, para conseguir estar al mismo nivel de inclusión que otras temáticas. Por ello, animo desde aquí a todos aquellos que deseen contribuir a su estudio histórico, que se atrevan y que con su “grano de arena” permitan ir logrando este objetivo.

Esta entrevista se efectúo de forma telemática el 22 de noviembre de 2021.

Autores de la entrevista: Ricardo Martínez Esquivel e Yván Pozuelo Andrés, director y editor de REHMLAC+.