Resumen
Este artículo tiene por objetivo un análisis de la práctica cosplay, en tanto práctica constitutiva y distintiva a partir de los de aficionados de anime y manga, quienes se vinculan a dichas producciones mediante una identificación y un performance. La investigación fue ejecutada mediante aproximaciones etnográficas a eventos de aficionados desde el 2016 al 2019, en los cuales la investigadora participó como observadora y también como cosplayer; acercamientos a su vez complementados mediante entrevistas a cosplayers y encargados de los eventos. El hallazgo explorado corresponde a la generación de parámetros propios por parte de los aficionados de anime y manga con respecto a la práctica cosplay, bajo los cuales el colectivo determina qué es un “buen” o “mal” cosplay(er), y quién sostiene las cualidades de un “verdadero” aficionado en contraposición a aquellos que no lo hacen. Esto se origina a partir de una identificación y afección hacia las producciones animadas japonesas; así como un acto calificado de performativo por parte de otras investigaciones, ya que el cosplay es una práctica donde se involucra una vestimenta y una actuación acorde a un personaje ficticio.