Primer contacto con la unidad de cuidados intensivos pediátricos: el papel de enfermería en la participación de la familia en el cuidado

Resumen

Introducción: La hospitalización de niñas y niños en unidades de cuidados intensivos es inesperada tanto para la familia como para la persona menor. Sentimientos de miedo e incertidumbre dominan los primeros momentos de contacto con esta realidad inesperada. En este contexto, las personas profesionales en enfermería actúan como enlace entre la familia y el ambiente.

Objetivo: Identificar las prácticas utilizadas por enfermería en la preparación y acogida de familiares en el ambiente de cuidados intensivos.

Método: Estudio exploratorio descriptivo, de naturaleza cualitativa, con la participación de 26 profesionales en enfermería que trabajan en una Unidad de Cuidados Intensivos Pediátricos de un Centro Hospitalario. Con esta población, se llevaron a cabo grupos focales, que tuvieron lugar entre el 9 de mayo y el 8 de junio de 2019.

Resultado: Después de organizar los resultados en categorías temáticas, la investigación identificó que, en el primer contacto con la Unidad de Cuidados Intensivos, la fase de integración en el contexto implicó la presentación de la persona profesional en enfermería, el tipo de información transmitida, la presentación de la estructura de la unidad, la presentación del estado general del paciente y la desmitificación del contexto. En cuanto a la acogida, la población participante en el estudio consideró este como un momento importante, condicionado por las competencias del personal de enfermería, como una primera evaluación de los familiares y para el cumplimiento de requisitos específicos.

Conclusión: El primer contacto en el proceso de acogida es una función de enfermería que no puede delegarse en otro profesional, así como la preparación familiar, que es un proceso continuo desde el primer contacto con el servicio.