Resumen
La dinámica moderna, con su constante actualización tecnológica y un mercado libre donde se inscriben novedosos productos comerciales, más otras manifestaciones, coloca a los estudios multiculturales ante un sistema abierto y dinámico, al que debe seguir desde múltiples ópticas disciplinarias. Pero el acercamiento ha de realizarse desde una interculturalidad y no una impostura incultural.
En esta propuesta de lectura sugerimos la importancia de construir los textos interculturales a partir de la posibilidad de articular distintas bases de producción: casas, petroglifos, tatuajes, vasijas, tejidos, máscaras, tradiciones orales, materiales impresos, entre otros.
La lectura cultural no debe ser lineal, sino que los pasos algorítmicos deben saltar entre un punto del sistema semiótico a otro, para que de este modo opere una dinámica conectiva entre puntos dispersos.
Además, este estudio interroga sobre la evolución del lenguaje, que ha sido transformado por imposiciones colonialistas, comerciales, bélicas, etc. Y, por otro lado, estudiar las manifestaciones culturales contemporáneas implica tomar consciencia de la importancia de considerar distintos ejes epistemológicos para acercarse a los objetos de estudio, los cuales cada vez son más cambiantes.
Finalmente, esta lectura parte de una selección de muestras literarias que nos permitirán interrogarnos acerca de qué entendemos por leer y cómo podemos ir construyendo bases sólidas a partir de nuestro principal recurso: la memoria. Por esto, vale ser fieles a nuestros nombres y mirar atrás para tomar consciencia del piso que está bajo nuestros pies.