Resumen
La parte del Código Civil dedicada a las obligaciones tiene la fama de ser aquella región donde el jurista se convierte en filósofo, en matemático, en lógico, dado el nivel de abstracción y de sublime racionalidad que la cultura jurídica ha llegado a alcanzar allí, remontándose desde sus orígenes clásicos. Desde hace alrededor de doscientos años la parte del Código Civil francés dedicada a las obligaciones ha sido calificado como “la razón escrita” precisamente para significar a la vez el alto grado de perfección de esta materia y su paso inalterable a través de los siglos: un conjunto de dogmas que la razón humana logró descubrir de una vez y para siempre.