Resumen
Las imágenes de ciudades sin gente que recientemente hemos visto en muchas partes del mundo debido a la pandemia provocada por el COVID-19 no muestran algo totalmente nuevo, pues la muerte simbólica y material de la ciudad acecha desde hace tiempo. El presente artículo investiga, a partir de los aportes de diversos autores, ciencias y disciplinas sociales, sobre la muerte real y virtual de la ciudad, así como sobre la pérdida de los atributos que la definen como tal. Algunas de estas cualidades son: la concentración y diversidad de espacios que permiten el encuentro y las relaciones de vecindad; la proximidad, el convivio, la solidaridad y el conflicto entre personas y agentes diversos; la mezcla social y económica; la diversidad cultural; la mixtura de actividades (trabajar, consumir, residir) y usos del suelo; y la comunidad política de ciudadanos que gobiernan y deciden sobre los asuntos públicos. Este escrito revisa
las diversas causas sociales, económicas y políticas que, con la consolidación del neoliberalismo como doctrina y sistema económico, han erosionado la ciudad como concepto, modo y lugar de la vida social.