Abstract
En este emotivo escrito hago un relato de las huellas de Ubiratan en tres momentos im- portantes para la comunidad de Educación Matemática en Venezuela: en su gestación, con su participación en la IV CIAEM realizada en Caracas en 1975; en su nacimiento, con el apoyo a la creación a nivel nacional de la Asociación Venezolana de Educación Matemática (ASOVEMAT), durante su asistencia al II Encuentro de Profesores de Matemática de las Re- giones Nor-Oriental, Insular y Guayana y, durante su evolución, con el soporte al Programa Venezolano de Doctorado en Educación Matemática (PROVEDEM) durante su participación en el III CIBEM celebrado en Caracas en 1998. En cada una de estas ocasiones Ubiratan nos nutrió de grandes enseñanzas desde sus teorías, especialmente la Etnomatemática, y sus experiencias de vida, y nos inspiró hacia la reflexión sobre una Educación Matemática con pertinencia social y cultural.