Resumen
Se propone establecer un análisis comparativo sobre la visión del actor desde la Memoria de las Emociones de Stanislavski y del Teatro del Oprimido de Boal. Ambos autores han propuesto teorías que se han vuelto modelos a seguir, en cuanto a su corpus teórico teatral y a su manera de ver y vivir el teatro contemporáneo. Han trascendido sus disciplinas, permitiendo establecer un diálogo entre la psicología, la pedagogía –a través de la intervención socialy
el arte. Los dos ofrecieron la idea de un nuevo actor, que se permite explorar y compartir en la escena porque trabaja con y para el ser humano. Han gestado la posibilidad de que el espectador logre un proceso catártico o ejercite una posible modificación del mundo real; que habite vidas que no son suyas o que provoque una reacción activa sobre su entorno.