Abstract
Durante muchos años se ha evidenciado la alta capacidad que tiene el ser humano para crear, diseñar y producir un sin número de productos que de alguna manera han revolucionado el estilo de vida, desde alimentarnos hasta cómo realizamos cada una de nuestras actividades diarias. Hoy sabemos que muchas de estas acciones producen una gama de efectos en todos los ambientes y la suma de ellos repercute nuevamente en nuestro día a día. Estos efectos van desde la alta contaminación del aire en algunas ciudades, al ineficiente manejo de desechos sólidos y la falta de implementación de economías circulares, hasta la presencia persistente de contaminantes en tierras que por años han sido altamente productivas. Muchos de estos contaminantes terminan siendo depositados en los océanos mediante la escorrentía, llegando a producir lo que se conoce como zonas muertas.
Las zonas muertas se encuentran en diferentes regiones, por lo general, cercanas a áreas continentales donde los vertidos de desechos industriales, fertilizantes y otros residuos agrícolas son considerablemente altos. Pero ¿cómo sucede?--LEER MÁS--