Resumen
La leucemia mieloide crónica (LMC) es una neoplasia de células madre hematopoyéticas clonales que resulta en un exceso de células del linaje granulocítico. Tiene una incidencia anual de 1 a 1,5 casos por cada 100.000 habitantes, de los cuales existe una relación hombres:mujeres de 1,3:1. La anormalidad genética característica y diagnóstica en esta patología es el cromosoma Filadelfia. Los tratamientos tradicionales empleados conducen a que el paciente desarrolle muchos efectos adversos. Con el avance de la medicina personalizada, se descubrieron los inhibidores de la tirosina quinasa, los cuales se establecieron debido a una mayor eficacia y una menor probabilidad de efectos adversos. Por ello, el objetivo del presente trabajo fue realizar una revisión sobre el su uso para el tratamiento de la LMC. Se encontró que su descubrimiento ha sido fundamental para la terapia de pacientes con LMC, pues constituyen hoy en día la primera línea de tratamiento. No obstante, las investigaciones con respecto a su uso en esta leucemia continúan, con el propósito de combinar los tratamientos, y realizar evaluaciones de eficacia, seguridad y potencia de este tipo de fármacos.