Resumen
En todos los tiempos la organización social ha sido estigmatizada por quienes se ven amenazados
con perder o restar su poder y control sobre los medios de producción, o sobre el poder del
Estado; en la historia se encuentran numerosos relatos de la trayectoria en la que transitaron
las organizaciones civiles, integradas por obreros, campesinos, indígenas y estudiantes,
principalmente, quienes han encontrado en la movilización el medio para el reconocimiento
de derechos y necesidades apremiantes para su reproducción social; así mismo, su impacto es
posible verlo ya sea a nivel local, regional y nacional.
La inconformidad social ha estado generalmente asociada con las condiciones de vida, de
trabajo y con el despojo de los medios de producción, teniendo como consecuencia la producción
de espacios desiguales; el punto de partida para entender el proceso que conlleva a un espacio
a ser distinto a otro radica en el modo de producción capitalista, quien determina las relaciones
sociales de producción y las formas en que se relacionan los elementos del espacio (la sociedad,
la instituciones, la empresa y el medio ecológico, según Milton Santos, 19861).
Cada uno de los elementos que producen al espacio social se relacionan de manera diversa,
la fuerza e influencia que tenga uno sobre los otros se encuentra determinada por el momento
histórico, definido esté último por la forma que adopta el capitalismo; por lo tanto, la fuerza de
trabajo, la empresa, las instituciones del Estado y el medio ecológico adquieren interpretaciones
y relaciones distintas según la mascara que adopte el modo de producción capitalista, llámese
producción fordista, flexible, global o neoliberal.