Resumen
Este proceso de indagación inicia con la búsqueda e interés de la investigadora por encontrar textos médicos que unifiquen la parte científica exacta con la parte científica social que deberían componer todo trabajo cuyo objeto de estudio sea lo humano, ante lo difícil y casi nulo que se tornó encontrar una tendencia de investigación que una estos dos enfoques, iniciamos un primer documento que pretende darle al ser humano con afectación en su salud, en este caso de la piel es decir, dermatológica, un rostro social que vaya más allá de la clínica, una visión un tanto holística del paciente que incluya a la persona y sus relaciones y acciones con y en su entorno. En un intento por darle forma y unidad a dos elementos que hasta el día de hoy han sido vistos por muchos investigadores como separados hemos utilizado aquí un enfoque sobre la piel, como sujeto político o social debido a que la piel es el órgano que sirve como carta de presentación del cuerpo humano hacia el exterior de ahí que utilicemos el nombre de “órgano político/ social”, por ende anclado en todos los deberes y restricciones que se le imponen al propio cuerpo.
Desde nuestro enfoque planteamos distintas maneras en que el cuerpo humano (desde el órgano de la piel) entra en un mecanismo de poder que lo explora, lo desarticula y lo recompone, transformándolo en una “piel social”.