Abstract
El 16 de noviembre de 1989 las fuerzas especiales del batallón Atlacatl, pertenecientes al ejército salvadoreño, irrumpieron violentamente en las instalaciones de la Universidad Centroamericana Simeón Cañas (UCA). Su objetivo: asesinar a un grupo de jesuitas responsables de la orientación política tomada por esta casa universitaria; la cual se caracterizó por una actitud crítica ante la coyuntura económica y social de este hermano país centroamericano. Bajo el rectorado del Dr. Ignacio Ellacuría, la UCA había asumido una postura de denuncia de las injusticias experimentadas por las mayorías populares, a causa de los intereses particulares de ciertas clases privilegiadas en el poder.