Resumen
La presente lectura de La orquesta de cristal (1976) se enfoca en caracterizar la poética de lo abigarrado y sus recursos. La hiperretórica, el kitsch y el humor conceptual son estrategias textuales que dan cuenta del carácter transgresor y exploratorio de la trilogía de novelas que Enrique Lihn dedicó a la retórica del poder. La voz narrativa del chileno expone una sensibilidad caracterizada por lo amontonado e inarmónico, una multiplicidad de colores y materiales heterogéneos unidos sin concierto. Lihn construye un habla marcada por la violencia política, la censura y autocensura. En la novela, el autor parodia no sólo a políticos y figuras de autoridad, sino también al campo cultural del momento y su seudo arte. Este trabajo expone una narrativa experimental y polifónica, capaz de generar atmósferas en que el detritus aparece como la máxima realización del intelecto latinoamericano, al ser sometido por la dictadura y un público adiestrado por monumentos al mal gusto.