Abstract
El papel de un pedagogo que se desempeña como profesor universitario es diverso y complejo. Se consideran factores como la naturaleza de su propia disciplina, el campo de especialización, los intereses profesionales y personales, la experiencia adquirida como miembro de una Facultad, las oportunidades de crecimiento profesional, las demandas prácticas asociadas a los objetivos y metas institucionales así como las expectativas de la unidad académica donde el profesor está nombrado.
A partir de 1977 la Vicerrectoría de Docencia de la Universidad de Costa Rica dirigió esfuerzos para diseñar la evaluación del personal docente (Esquivel y Gurdián, 1981). Desde esa fecha y siguiendo los procedimientos pertinentes, se ha llegado a contar con un programa de evaluación académica bastante objetivo y confiable.
Las universidades utilizan sistemas de evaluación que incorporan información recogida de múltiples fuentes, usando múltiples métodos para satisfacer múltiples propósitos institucionales.