Resumen
El presente artículo continúa la exploración de la estética de la muerte en algunas obras de la escritora salvadoreña Claudia Hernández dentro de la literatura de posguerra. La violencia continúa presente como un leitmotiv en la narrativa. Sin embargo, los cuentos analizados en el presente artículo dan un giro temático y estilístico. Los personajes y las tramas se desarrollan en formas menos simbólicas y más realistas. Las marcas de la violencia son evidentes en los cuerpos de personajes desnudos, así como en las mentes y los cuerpos de los niños. Los ángeles, demonios y fantasmas encarnan personajes desarraigados, oprimidos y marcados que se enrumban sobre rutas de muerte.