Abstract
Este artículo analiza la participación de los inmigrantes y exiliados nicaragüenses durante la guerra civil costarricense de 1948. Para ello se toma en cuenta cómo la oposición costarricense destacó la “interferencia” nicaragüense para, en primer lugar, demonizar los gobiernos de Rafael Ángel Calderón y Teodoro Picado y, en segundo lugar, justificar el aumento de violencia contra sus partidiarios, los supuestos “calderocomunistas”. Luego se examina el papel que los nicaragüenses jugaron durante el conflicto, cómo los exiliados y obreros lucharon en ambos lados, y cómo ellos afectaron el curso del conflicto. La sección final examina las consecuencias de la guerra para los nicaragüenses.