Resumen
Si partimos de la distinción fundamental entre "naturaleza" y "cultura", en la cual la primera se nos presenta como dada, en tanto que la segunda representa una construcción específicamente humana para enfrentar e interpretar la naturaleza, podremos fácilmente reconocer la necesidad humana de construir contextos culturales que nos brinden un marco de referencia para el pensamiento, la emoción y la acción.
La docencia universitaria es una actividad que se desarrollar en un contexto institucional, caracterizado por una estructura social y por una "cultura" o conjunto de significados compartidos por los sujetos que participan de dicha actividad. La reflexión sistemática acerca de nuestra práctica docente, que es requisito indispensable para superar el riesgo de convertir dicha práctica en una práctica inerte, sin conexiones reales con el discurso pedagógico que utilicemos para justificarla, requiere de un análisis cuidadoso de las concepcionesy creencias de docentes y estudiantes en relación con la enseñanza, el aprendizaje, y el fenómeno educativo en general.
En este artículo se desea proponer el análisis de las metáforas que utilizamos diariamente para referirnos a nuestro quehacer docente, como una alternativa metodológica que puede contribuir a la reflexion acerca de la práctica docente que desarrollamos como parte de nuestro ejercicio profesional.